El antifascismo toma las calles de La Laguna en Tenerife
La movilización refleja el creciente grado de conciencia sobre la necesidad de acabar con el fascismo.
A raíz de la agresión a un ciudadano lagunero que recriminó en una céntrica calle, el pasado 12 de Octubre, la exhibición de símbolos franquistas por miembros de Vox, se ha reactivado el espíritu y la organización para la respuesta antifascista en dicha población tinerfeña.
La convocatoria del sábado 24 de octubre consiguió movilizar a amplios sectores sociales y políticos, así como a un contingente policial que rodeaba una manzana aledaña y ejerció mediante identificaciones, cacheos y coacciones de palabra. La concentración que tuvo lugar en el mismo centro del casco histórico lagunero tuvo una gran combatividad siendo de resaltar también el notable predominio de jóvenes.
Independientemente de los motivos de sus votantes para apoyar a Vox y aunque se le mencione como partido ultra, la definición que le encaja a la perfección es la de partido fascista. Hace apología del franquismo al negarse a condenarlo por ningún motivo. Muchos de sus cargos provienen de formaciones fascistas, neo-nazis, ultras, xenófobas y militares que firmaron el manifiesto de exaltación a Franco. Se reúnen con partidos ultra-católicos y de la ultra-derecha en general.
Vox niega la violencia de género, miente continuamente con los datos relativos a la inmigración y su repercusión en la tasa de delitos, una y otra vez. Tiene un discurso xenófobo y militarista contra todos los musulmanes que parece casi pedir una nueva cruzada. Dispone de cargos involucrados en homofobia, racismo, delitos violentos, algunos incluso con incitación o apoyo a la guerra civil. Inventan historias y difaman sobre la memoria histórica sin ninguna acreditación. También plantea ilegalizar a partidos, veta y amenaza de cierre a medios de comunicación…
No se puede permitir por más tiempo ésta “libertad para acabar con la libertad”, hay que arrinconar a Vox mediante el correspondiente ejercicio de acciones penales. Hay modelos en el marco europeo, en Alemania y otros países, en Grecia recientemente en relación con Amanecer Dorado. Incluso, al parecer, podría servir la Ley de Partidos aprobada en 2002 por el gobierno del Partido Popular creada para arrinconar a las formaciones de la izquierda abertzale. Ello en base a lo que establece el artículo 6 de dicha normativa que dispone que los partidos políticos se «ajustarán en su organización, funcionamiento y actividad a los principios democráticos y a lo dispuesto en la Constitución y en las leyes», así como a lo regulado en el artículo 9 puntos 1 y 2 cuando señala la necesidad de que las organizaciones políticas «deberán respetar en las mismas los valores constitucionales, expresados en los principios democráticos y en los derechos humanos» debiendo desarrollar «las funciones que constitucionalmente se les atribuyen de forma democrática y con pleno respeto al pluralismo.» Finalmente dispone la Ley de Partidos Políticos que un partido político será declarado ilegal «cuando su actividad vulnere los principios democráticos, particularmente cuando con la misma persiga deteriorar o destruir el régimen de libertades o imposibilitar o eliminar el sistema democrático.»
¿A que espera el gobierno de coalición? ¡Ilegalización de Vox ya!
Corresponsal de Canarias