Clase “en sí” y clase “para sí”
Diccionario filosófico marxista · 1946:44-45
Clase “en sí” y clase “para sí”
Marx y Engels, en el Manifiesto del Partido Comunista, hablan de la
evolución del proletariado: de clase “en sí” en clase “para sí”. Las
nociones de “en sí” y “para sí” reflejan las diversas fases de
maduración del proletariado, del crecimiento de su autoconciencia como
una fuerza política independiente. Hubo necesidad de toda una etapa
histórica para que el proletariado pudiera adquirir conciencia de sus
intereses como irreconciliablemente contrapuestos a los del capital.
Ejemplos de la historia, tales como el movimiento ludista en
Inglaterra, cuando los obreros, indignados por la cruel explotación,
destrozaban la maquinaria sin saber distinguir entre la maquinaria
como tal y su aplicación capitalista como instrumento de explotación,
demuestran que el proletariado no llegó a adquirir de golpe su
conciencia de clase. “Al principio son obreros aislados; luego los de
una fábrica, luego los de toda una rama de trabajo quienes se
enfrentan en una localidad con el burgués que personalmente los
explota” (Marx). En esta fase los obreros no luchan aún contra los
capitalistas como clase. El proletariado no se había elevado hasta
comprender sus tareas generales de clase, todavía representa una clase
“en sí”. “En esta primera etapa los obreros forman una masa
diseminada por todo el país y desunida por la concurrencia” (Marx).
La transición del proletariado a la fase siguiente, superior, de su
autoconciencia de clase se realiza sobre la base del desarrollo del
propio capitalismo. Con el incremento de los talleres y de las
fábricas, aumenta numéricamente el proletariado, su organización, su
cohesión, su experiencia de la lucha de clases. De la lucha contra
capitalistas individuales, sus patronos directos, los obreros pasan a
la lucha contra la clase de los capitalistas en general y contra su
Estado. El crecimiento de la autoconciencia del proletariado se
efectúa en el proceso de la lucha práctica contra los capitalistas y
halla su expresión máxima en la organización del partido político del
proletariado, el Partido Comunista, vanguardia combatiente de la clase
obrera. El proletariado cobra conciencia de su misión histórica y se
transforma en una clase “para sí”.
Diccionario de filosofía y sociología marxista · 1959:17
Clase “en sí” y clase “para “sí”
Marx y Engels, en “El manifiesto comunista” hablan sobre el desarrollo
del proletariado desde clase “en sí” hasta clase “para sí”. Los
conceptos de “en sí” y “para sí”, representan los distintos grados de
madurez del proletariado y del crecimiento de la conciencia de sí
mismo, como fuerza política independiente. Fue necesaria toda una
etapa histórica para que el proletariado pudiera reconocer sus
intereses como irreconciliablemente opuestos al capital. Ejemplos en
la historia, tales como el movimiento ludista en Inglaterra cuando los
obreros, indignados por la dura explotación de que eran objeto,
rompían las máquinas, no sabiendo diferenciar la máquina de su
aplicación capitalista en calidad de instrumento de explotación,
demuestran que el proletariado no adquirió de golpe su conciencia de
clase. “Al principio, la lucha se sigue por obreros de una fábrica y,
más adelante, por los obreros del mismo ramo, de un lugar, contra un
burgués aislado, el que directamente los explota” (Marx). En esta
etapa, los obreros no luchan todavía contra los capitalistas como
clase. El proletariado aun no se elevó hasta la comprensión de los
problemas generales de su clase; todavía representa una clase “en sí”.
“En esta etapa, los obreros forman una masa diseminada por todo el
país y dividida por la concurrencia” (Marx). La transición del
proletariado a la etapa siguiente, más elevada, de su autoconciencia
de clase, se origina sobre la base del desarrollo del propio
capitalismo. Con el aumento de las fábricas y empresas industriales,
aumenta numéricamente el proletariado, su organización, su unidad y su
experiencia en la lucha de clases. De la lucha con un capitalista
aislado, su patrón directo, los obreros pasan a la lucha contra la
clase de los capitalistas en total y contra su Estado. El crecimiento
de la autoconciencia del proletariado origínase en el proceso de la
lucha práctica con los capitalistas y encuentra su máxima expresión en
la organización del partido político del proletariado –el partido
comunista–, vanguardia combatiente de las masas. Entonces, el
proletariado cobra conciencia de su misión histórica y se convierte en
una clase “para sí”.
Diccionario filosófico abreviado · 1959:68-69
Clase “en sí” y clase “para sí”
Términos de los que se servían Marx y Engels para designar los
diversos grados de madurez política del proletariado, las fases en que
toma conciencia como fuerza política independiente. Fue preciso que
el proletariado franqueara toda una etapa histórica para comprender
que sus intereses son irreductiblemente contrarios a los del capital.
Ejemplos históricos como el movimiento de los “luddistas” en
Inglaterra, en el que los obreros, exasperados por una explotación
feroz rompían las máquinas sin comprender las causas reales de la
explotación, muestran que el proletariado no adquirió de un solo golpe
conciencia de sí mismo como clase. Primeramente, son los obreros
aislados los que emprenden el combate, escribían Marx y Engels en el
Manifiesto del Partido Comunista; después, los obreros de una misma
fábrica, y por fin, los obreros de una misma rama de la industria en
una misma localidad contra el burgués que los explota directamente.
En esta etapa, los obreros no luchan todavía contra la clase de los
capitalistas. El proletariado no se ha elevado todavía hasta la
comprensión de sus tareas de clase: es todavía una clase “en sí”.
“En esta etapa, los obreros forman una masa diseminada por todo el
país y disgregada por la competencia” (Marx y Engels, “Manifiesto del
Partido Comunista”, en Obras escogidas, t. I, p. 30, Ed. esp.,
Moscú, 1951).
En el grado siguiente, superior, de su conciencia de clase, el
proletariado se eleva en razón del desarrollo mismo del capitalismo.
A medida que se multiplican las fábricas y las empresas, el
proletariado aumenta en cantidad, su organización mejora y su cohesión
y su experiencia de la lucha de clases se hacen mayores. De la lucha
contra un capitalista aislado, su patrón inmediato, los obreros pasan
a la lucha contra la clase de los capitalistas en conjunto y contra el
estado del capital. La conciencia del proletariado crece en el curso
de su lucha práctica contra los capitalistas, lo que se manifiesta por
la creación de una teoría revolucionaria, por la organización de un
partido político del proletariado, el Partido Comunista, vanguardia de
la clase obrera. El proletariado toma conciencia de su misión
histórica y se convierte en una clase “para sí”. Subordina su lucha a
una tarea: la conquista de la dictadura del proletariado y la
transformación comunista de la sociedad.
No figura en el Diccionario filosófico · 1965
No figura en el Diccionario de filosofía · 1984