3-Esclavitud

Esclavitud

No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946

Diccionario filosófico abreviado · 1959:162-163

Esclavitud

Primera sociedad antagónica de clases que nació sobre las ruinas de la
comuna primitiva (ver), a consecuencia del desarrollo de las fuerzas
productivas, de la propiedad privada, de la acentuación de la
desigualdad económica. Del mismo modo que la comuna primitiva, la
esclavitud existió, en diferentes proporciones, en todos los pueblos,
y se había extendido mucho en Oriente: Egipto, Asiria, Babilonia,
Mesopotamia, India, Transcaucasia (Urartú) y otras regiones. Los
esclavos se contaban por decenas de millares. Sin embargo, en esos
países, la esclavitud tenía sobre todo un carácter doméstico y
patriarcal, y los esclavos no constituían la fuerza productiva
esencial. Los campesinos, estrechamente ligados a la comuna y
explotados duramente por un estado despótico, constituían la fuerza
productiva principal en el Oriente antiguo. De igual modo, en la
Rusia de antaño, y sobre todo en la época del principado de Kiev, la
esclavitud era doméstica y patriarcal, pero menos desarrollada que en
Oriente. En la Grecia y Roma antiguas es donde la esclavitud alcanza
su forma superior, y donde el esclavo se convierte en la fuerza
productiva esencial de la sociedad, y la esclavitud, en el modo de
producción dominante.

Bajo este régimen, los propietarios de esclavos constituyen la clase
dominante que se divide en grupos sociales distintos: grandes
terratenientes, propietarios de grandes talleres, comerciantes,
usureros. La segunda clase fundamental es la numerosa clase de los
esclavos. Aparte de estas dos clases esenciales, hay en esta sociedad
capas intermedias de población libre: pequeños propietarios que viven
de su trabajo (artesanos y campesinos) y el lumpen-proletariado que
proviene de las capas de artesanos y campesinos arruinados. Las
relaciones de producción tienen por fundamento la propiedad del amo
sobre los medios de producción y sobre el esclavo que puede vender,
comprar y hasta matar. Estas relaciones corresponden a un nivel de
las fuerzas productivas superior al de la comuna primitiva. La
ganadería, la agricultura, los oficios, la división del trabajo entre
esas diferentes ramas de la producción, y el empleo de instrumentos
metálicos se han extendido ampliamente. La producción mercantil se
desarrolla.

La explotación de los esclavos basada en la coerción extraeconómica
adquiere proporciones monstruosas. A la explotación y a la violencia,
los esclavos responden con un bajo rendimiento y con el deterioro de
los instrumentos. El plus-producto creado por cada esclavo
separadamente, es insignificante. Pero la suma general de
plus-productos proveniente de la explotación de una cantidad enorme de
esclavos, cuyo trabajo no costaba casi nada, es relativamente elevada.
Esta base hizo posible cierto progreso social, el desarrollo de las
ciencias, del arte, de la filosofía. Se observa igualmente cierto
progreso en la técnica que permanece, no obstante, muy poco
evolucionada y rutinaria, dado que estaba fundada en la esclavitud.
Los precios irrisorios de los esclavos, el trabajo casi gratuito de
estos últimos, no ofrecen estimulante económico a los amos como para
introducir elementos de producción nuevos, perfeccionados.

Con la aparición de la sociedad esclavista, nace y se desarrolla el
Estado como aparato de coerción, como máquina que sirve a la opresión
de la mayoría explotada de la sociedad por una minoría de
explotadores. Toda la historia de la esclavitud es la historia de una
lucha de clases cruel. La esclavitud fue una etapa necesaria en el
progreso de la sociedad, y sirvió de terreno a una evolución más
rápida de las fuerzas productivas, de las ciencias, de la cultura.
Pero después de haber alcanzado cierto nivel, las fuerzas productivas
no podían desarrollarse más en el marco de relaciones de producción de
la sociedad esclavista. Con la disgregación de la sociedad
esclavista, la lucha de clases alcanza su punto culminante. Las
sublevaciones de esclavos se entremezclan con la lucha de los pequeños
campesinos arruinados contra los grandes propietarios de tierras. La
caída del régimen esclavista en Roma fue acelerada por las invasiones.
La forma de explotación esclavista es reemplazada por otra, la
explotación feudal. Con la desaparición del modo de producción
esclavista, la esclavitud no desaparece completamente. Subsiste en
medida más o menos grande bajo los regímenes feudal y capitalista.

Diccionario filosófico · 1965:396-397

Régimen esclavista

Primera sociedad antagónica, de clases; surgió de las ruinas del
régimen de la comunidad primitiva. En una escala mayor o menor y en
una u otra forma, la esclavitud se ha dado en todos los países y en
todos los pueblos. Alcanzó su forma suprema de desarrollo en la
antigua Grecia y en la antigua Roma, donde los esclavos se
convirtieron en la principal fuerza productiva de la sociedad. En el
régimen esclavista, la clase dominante y una de las clases
fundamentales es la de los dueños de esclavos, explotadores. Se
descompone en distintos grupos sociales: grandes terratenientes,
dueños de grandes talleres, comerciantes y usureros. La segunda clase
fundamental es la numerosa y explotada de los esclavos. Aparte de
estas dos clases principales, en la sociedad esclavista existen capas
intermedias de la población libre: pequeños propietarios que viven de
su trabajo (artesanos y campesinos) y también el “lumpenproletariado”
proveniente de artesanos y campesinos arruinados. La base de las
relaciones de producción dominantes en la sociedad esclavista es la
propiedad privada del esclavista sobre los medios de producción y los
esclavos. La explotación de éstos, basada en la coerción
extraeconómica, adquiere proporciones monstruosas. A la explotación y
a la violencia, los esclavos responden con una baja productividad del
trabajo y estropeando los instrumentos de producción. El plusproducto
creado por cada esclavo era insignificante. Sin embargo, la masa
total del plusproducto, al explotarse una cantidad inmensa de
esclavos, dada la baratura extraordinaria de su trabajo, era
relativamente grande. Ello hizo posible cierto progreso social y
técnico, el cultivo de la ciencia, del arte y de la filosofía. Al
surgir la sociedad esclavista, aparece y se desarrolla el Estado.
Toda la historia de la esclavitud es una historia de la lucha de
clases. Al descomponerse el régimen esclavista, la lucha de clases
alcanza su punto culminante. Las sublevaciones de esclavos se
entrelazan con la lucha de los pequeños campesinos arruinados contra
los grandes terratenientes. El hundimiento del régimen esclavista se
aceleró, en Roma, por las invasiones del exterior. La forma
esclavista de explotación es sustituida por otra, la feudal. Con la
eliminación del modo esclavista de producción, la esclavitud no
desaparece por completo. Sigue existiendo en mayor o menor escala en
el periodo del feudalismo y también en el periodo del capitalismo.

Diccionario de filosofía · 1984:367-368

Régimen esclavista

Formación socioeconómica, basada en la explotación por la clase de los
esclavistas de la clase de los esclavos, que no sólo están privados de
la propiedad de los medios de producción, sino que ellos mismos son
propiedad de sus patronos, como “instrumentos de trabajo parlantes”.
El régimen esclavista es la primera formación de clase antagónica, que
surge a consecuencia de un largo período de descomposición del régimen
de la comunidad primitiva y establecimiento de los institutos de la
sociedad dividida en clases: la propiedad privada y el Estado.
Alcanza su apogeo en la Grecia y la Roma Antigua, donde sobre su base
se erigen una economía eficiente para aquel entonces y una elevada
cultura: filosofía y arte. Las fuerzas productivas del régimen
esclavista estaban compuestas por instrumentos de trabajo manuales y
grandes masas de esclavos. Las relaciones de producción se basaban en
una cruelísima explotación y opresión de estos últimos. Reduciendo al
mínimo las necesidades de los esclavos, dichas relaciones permitieron
obtener un plusproducto considerable, en comparación con el modo de
producción precedente, lo cual condujo al fortalecimiento de la
propiedad privada y al desarrollo de las relaciones mercantiles:
intercambio, comercio, circulación monetaria. Se libraban
constantemente guerras de rapiña como importante fuente de obtención
de esclavos. Además de las clases fundamentales (esclavistas y
esclavos), en la sociedad esclavista existían mercaderes, usureros,
artesanos y campesinos libres, pequeños propietarios que no gozaban de
la plenitud de derechos, y una nutrida masa de elementos desclasados.
La forma de los Estados esclavistas era la monarquía o la república.
En esta última, los ciudadanos libres participaban en la actividad de
las instituciones democráticas (asamblea popular y otras). La
democracia no se extendía a los esclavos. Estos luchaban y se
sublevaban contra los esclavistas. Las sublevaciones más grandes de
los esclavos se registran en la Roma Antigua (la de Espartaco). La
agudización de la lucha de clases y la irrupción desde fuera
condujeron a la destrucción del régimen esclavista y su sustitución
por el feudalismo. La esclavitud existía en la mayoría de los
pueblos, pero algunos de ellos soslayaron el régimen esclavista como
formación, pasando del régimen de la comunidad primitiva directamente
al feudalismo. En algunos países, la esclavitud existió tanto bajo el
feudalismo como bajo el capitalismo.

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