Familia
No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946
Diccionario filosófico abreviado · 1959:181-182
Familia
Forma histórica de organización de la vida común de los seres humanos
de los dos sexos. Todos los cambios sobrevenidos en el transcurso de
la historia en las relaciones entre los sexos, el matrimonio, la forma
de la familia, han sido condicionados por los cambios en el régimen
económico-social, por el carácter de las relaciones sociales en
general. En los tiempos más remotos, el comercio sexual entre los
seres humanos no estaba sometido a ninguna regla. A partir de este
estado de cosas primitivo, se desarrollaron diversas formas de
matrimonio y de familia. En su obra El origen de la familia, la
propiedad privada y el Estado (ver), Engels señala que la historia
muestra tres formas principales de matrimonio. En tiempos de la
sociedad gentilicia, el matrimonio por grupos predomina en dos formas:
la familia consanguínea y la familia “punalúa”, palabra que quiere
decir “compañero íntimo”. En el seno de la familia consanguínea,
hermanos y hermanas son marido y mujer; el matrimonio se excluye
únicamente entre padres e hijos. En la familia “punalúa”, se excluye
a los hermanos y hermanas del comercio sexual. En esta época, el
parentesco se sigue en línea materna, y prevalece el derecho materno.
Estas formas de familia tienen por fundamento económico el trabajo
doméstico primitivo donde la mujer desempeña el papel esencial (ver
Matriarcado). Como consecuencia, el círculo de parientes que pueden
contraer relaciones conyugales se restringe. Poco a poco, las
antiguas formas de matrimonio por grupos ceden el lugar a la “familia
sindiásmica”. En la “familia sindiásmica”, un hombre vive con una
mujer, pero conserva el derecho de la poligamia, y el vínculo conyugal
puede romperse fácilmente. Los hijos pertenecen igual que antes, a la
madre. La cría de ganado, el aumento de las riquezas, el progreso en
la división del trabajo, engendran la propiedad privada. Este cambio
radical en las relaciones sociales significa el hundimiento del
derecho materno y el pasaje del poder doméstico a las manos del padre,
quien comienza a desempeñar un papel preponderante en la economía.
(Ver Patriarcado). Aparece la familia patriarcal, a partir de la
cual, la filiación se establece de acuerdo con la línea paterna. Más
tarde, con la disolución de la comuna primitiva, surge la monogamia.
Aunque ésta representa un progreso, la familia monógama basada en la
propiedad privada, no es, sin embargo, como lo señala Engels, la forma
superior de matrimonio. La mujer se convierte en esclava del hombre;
“…el primer antagonismo de clases que apareció en la historia coincide
con el desarrollo del antagonismo entre el hombre y la mujer en la
monogamia; y la primera opresión de clases, con la del sexo femenino
por el masculino” (El origen de la familia…, en Marx/Engels, Obras
escogidas, t. II, p. 208, Ed. esp., Moscú 1952). La familia
reflejaba en miniatura todas las contradicciones del desarrollo
social. En la sociedad burguesa, la propiedad privada imprimió su
sello a la forma de organización familiar. En la familia burguesa,
desempeñan un gran papel los intereses comerciales y las groseras
consideraciones pecuniarias. El matrimonio tiene por complemento la
prostitución legalizada.
Sólo en el seno de la población trabajadora, en las clases oprimidas,
y sobre todo, en el proletariado, sobre la base de relaciones
diferentes (amistosa ayuda mutua y respeto mutuo de la dignidad
humana) podía nacer y florecer un amor verdaderamente humano,
fundamento de una forma de familia nueva, superior. La gran
Revolución Socialista de Octubre en Rusia liberó a la mujer y le
otorgó los mismos derechos que al hombre. En adelante la mujer
desempeña un papel activo en la producción y en la cultura. Su
situación en la sociedad ha cambiado por completo y su papel en la
producción y en la vida social ha aumentado considerablemente. La
mujer se ha convertido en una gran fuerza en la sociedad soviética, lo
que no podía menos de ejercer la influencia más saludable sobre las
relaciones entre el hombre y la mujer. El motivo esencial del
matrimonio en la sociedad socialista, es, en adelante, un amor
verdaderamente humano entre el hombre y la mujer. Sobre esta base
–consolidada por los intereses comunes del hombre y de la mujer en el
dominio de la producción, de la vida social y de la cultura, por su
afinidad de ideas– apareció y se afirma sin cesar la familia
soviética, familia de tipo nuevo sin precedente en la historia. En la
U.R.S.S., la familia es la colectividad primaria de la sociedad
soviética, es la célula orgánica que comparte la vida y los intereses
comunes de toda la sociedad. Los esposos ocupan una posición igual,
contribuyendo por igual, por medio de su trabajo, a la organización de
la vida de la familia. La elevación general del bienestar en el país
entero, favorece el crecimiento de la población, lo que se expresa en
particular, por el aumento incesante de las familias numerosas. Las
diversas instituciones de protección a la madre y al niño, las
maternidades, los consultorios para mujeres, las casa-cunas, los
jardines infantiles y las escuelas, están destinadas a aportar su
concurso a los padres en la educación física y moral de sus hijos. La
comunidad de ideas de los esposos, los principios y métodos soviéticos
de educación de los niños, refuerzan la familia y hacen de ella uno de
los fundamentos de la sociedad. Para cimentar aun más la familia
soviética, es preciso combatir los vestigios del capitalismo en las
relaciones entre los hombres y las mujeres. La opinión pública y las
leyes soviéticas condenan las costumbres burguesas y velan por el
reforzamiento de la familia y por la educación de la joven generación.
Diccionario filosófico · 1965:169
Familia
Célula de la sociedad; se basa en el parentesco conyugal y
consanguíneo, es decir, en las relaciones entre marido y mujer, padres
e hijos, hermanos y hermanas, etc. La vida de la familia se
caracteriza tanto por procesos materiales como por procesos
espirituales. Pertenecen a los primeros, las relaciones biológicas
naturales, relaciones económicas y de consumo; a las segundas, las
relaciones morales y psicológicas. La familia es una categoría
histórica. Su vida y sus formas están condicionadas por el régimen
económicosocial imperante y por el carácter de las relaciones sociales
en su conjunto. En la remota antigüedad, las relaciones sexuales
ofrecían un carácter desordenado, la familia no existía. Surge, ésta,
en el período del régimen gentilicio sobre la base de la división del
trabajo según el sexo y la edad y de la forma sedentaria de vida,
cuando a la relación natural entre las personas de distinto sexo, se
añadieron las relaciones y los intereses económicos. En el período
del matriarcado, existía la gran familia matriarcal, la comunidad y el
matrimonio por grupos, convertido luego en matrimonio por parejas. En
el período del patriarcado, surge la gran familia patriarcal, la
comunidad que, con el establecimiento de la democracia militar, se
transforma en una pequeña familia patriarcal basada en el matrimonio
monógamo, (monogamia). Al mismo tiempo, la mujer se convierte en
propiedad de su marido, en su esclava. El fin principal de la familia
pasa a ser el de la acumulación de riqueza y su transmisión a los
herederos legítimos. Imprime una huella singularmente profunda en la
familia, la propiedad privada de la sociedad burguesa. El tosco
cálculo material, el beneficio comercial del matrimonio desempeñan en
ésta un papel inmenso. Como complemento del matrimonio, se establece
la prostitución legalizada. Tan sólo en el ambiente proletario surgen
y se desarrollan relaciones conyugales y familiares libres de las
deformaciones aludidas con el amor, la amistad y la confianza mutua
como base. Ello se debe al incremento de la industria mecanizada, a
la amplia incorporación de la mujer a la producción y a la vida
social. La victoria del socialismo ha abierto amplios horizontes a la
igualdad del hombre y de la mujer en todas las esferas de la vida
social, en la producción, en la vida cotidiana, en la familia. El
amor, el respeto mutuo, el cuidado por la educación de los hijos
constituyen los principios morales mas importantes de la familia
soviética. El Partido Comunista siempre ha concedido gran atención a
las cuestiones relacionadas con el fortalecimiento de la familia, ha
luchado y lucha contra las supervivencias del capitalismo en las
relaciones familiares. En el período de la edificación comunista, a
medida que se eleve el bienestar material de los trabajadores y
arraiguen en la vida de la sociedad las normas de la moral comunista,
se perfeccionarán las relaciones familiares. “…Bajo el comunismo, la
familia se consolidará, las relaciones familiares quedarán
definitivamente exentas de todo cálculo material, se alcanzará un alto
nivel de pureza y estabilidad”. («Documentos del XXII Congreso del
P.C.U.S.», pág. 196).
Diccionario de filosofía · 1984:163-164
Familia
Célula (pequeño grupo social) de la sociedad, importantísima forma de
organización de la vida cotidiana personal, fundada en la unión
matrimonial y los lazos de parentesco, es decir, en las relaciones
multilaterales entre el esposo y la esposa, los padres y sus hijos,
los hermanos y las hermanas y otros parientes que viven juntos y
administran en común la economía doméstica. La vida de la familia se
caracteriza por distintos procesos materiales (biológicos, económicos)
y espirituales (morales, jurídicos, psicológicos, estéticos). El
papel social de la familia se determina por su participación directa
en la reproducción del hombre mismo, en la prolongación del género
humano. La familia es una categoría histórica. Sus formas y
funciones se condicionan por el carácter de las relaciones de
producción, por las relaciones sociales en su conjunto, así como por
el nivel de desarrollo cultural de la sociedad concreta. A su vez, la
familia también influye sobre la vida de la sociedad (procreación,
educación social de niños y adolescentes, trabajo en la economía
doméstica, influencia sobre el desarrollo físico, espiritual y
estético-moral de los miembros de la familia). En la cuestión del
origen de la familia existen dos puntos de vista. La mayoría de los
especialistas siguen considerando que en las etapas iniciales del
régimen de la comunidad primitiva dominaban las relaciones sexuales
desordenadas. Las sustituyó el matrimonio en grupo, desplazado más
tarde por el matrimonio sindiásmico, que al comienzo se convirtió en
base de una gran familia-comunidad materna y, más tarde, de una gran
familia-comunidad paterna en conformidad con el linaje materno
(matriarcado) y el paterno (patriarcado). Algunas investigaciones
nuevas sugirieron a distintos científicos la conclusión de que desde
el comienzo existió la familia sindiásmica sobre la base de las gens
femenina y masculina (matriarcado, patriarcado), que fijaba el
parentesco por línea tanto materna como paterna. El establecimiento
de la monogamia iba acompañado de la esclavización de la mujer por el
hombre. La mujer se iba convirtiendo gradualmente en propiedad y
esclava de su dueño: el marido. El fin principal de la familia pasa a
ser la acumulación de riqueza y su transmisión a los herederos
legítimos. En las condiciones del dominio de la propiedad privada, el
matrimonio lo completa la prostitución legitimizada. La propiedad
privada condiciona en gran medida el carácter de las relaciones
intrafamiliares. Desempeña un papel inmenso el burdo cálculo
material, la ventaja comercial que promete el matrimonio. En el medio
proletario surgieron y se desarrollaron relaciones
matrimonial-familiares exentas de estas desvirtuaciones y fundadas en
el amor, la amistad y la confianza mutua. Este hecho está vinculado
con la amplia incorporación de las mujeres a la esfera de la actividad
productiva y social. El triunfo del socialismo abre un vasto campo
para lograr la igualdad de la mujer con el hombre en todas las esferas
de la vida social, comprendida la familia. Importantes principios
morales de la familia en la sociedad socialista son el amor, el
respeto mutuo, el desvelo por la educación de los hijos y la
preocupación de los hijos adultos por sus padres. La Constitución de
la URSS dice: “La familia se encuentra bajo el amparo del Estado.” Las
relaciones familiares se van perfeccionando en el curso de la
construcción del comunismo. Por ejemplo, las relaciones jurídicas en
la familia irán desapareciendo gradualmente a medida que se hagan
socialmente innecesarias; disminuirá la significación de las
relaciones económicas y de consumo; se promoverán a primer plano las
relaciones morales, estéticas y psicológicas que se irán
perfeccionando conforme al desarrollo armónico del individuo.