2-Hábitos

Hábitos

No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946

No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959

Diccionario filosófico · 1965:208

Hábitos

Acciones que se convierten en automáticas como resultado de una
prolongada repetición. El mecanismo fisiológico de los hábitos es el
estereotipo dinámico. Los hábitos de los animales no son conscientes.
También en el hombre surgen hábitos que, por su mecanismo psicológico,
son análogos a los de los animales. Se forman en el transcurso de la
adaptación, de la acomodación al medio circundante. Son acciones
automatizadas concordantes con peculiaridades concretas de una
situación. Algunos de tales hábitos son prácticamente valiosos, mas
resulta imposible transmitirlos a otro hombre mientras no se haya
llegado a tener conciencia de ellos. La forma superior de los hábitos
está constituida por aquellos elementos que han sido previamente
conscientes, se descomponen mentalmente y se agrupan en sistemas que
responden a las peculiaridades generalizadas de la situación objetiva
en que tales hábitos se elaboran. En este caso, el hombre, en el
proceso de automatización y funcionamiento de los hábitos; conserva la
posibilidad de controlar conscientemente sus actos y puede
modificarlos con relativa facilidad cuando resulta necesario. Los
hábitos se dan en todo tipo de actividad, tanto externa (por ejemplo,
hábitos de movimiento) como interna (por ejemplo, acciones mentales
automatizadas). Los hábitos no sólo son resultado, sino, además,
condición de la actividad creadora del hombre.

Diccionario de filosofía · 1984:200

Hábitos

Acciones que en virtud de su repetición durante un tiempo prolongado
pasan a ser automáticas. El mecanismo fisiológico de los hábitos es
el estereotipo dinámico. Los hábitos de los animales son
inconscientes y se forman en el curso de la adaptación al medio.
Hábitos análogos por el mecanismo psicológico surgen también en el
hombre. Son acciones automáticas adaptadas a las particularidades
concretas de la situación. Algunos de estos hábitos son prácticamente
valiosos, pero mientras no se concientizan, no pueden ser transmitidos
a otro hombre valiéndose de las formas modernas de enseñanza. La
forma superior de hábito son los hábitos humanos cuyos componentes se
concientizan previamente, se descomponen conscientemente y se unifican
en sistemas que se corresponden con las peculiaridades sintetizadas de
la situación objetiva en que ellos se forman. En este caso, en el
proceso de automatización y funcionamiento de hábitos, el hombre
conserva la posibilidad de controlar conscientemente sus propias
acciones y, si es necesario, puede reestructurarlas con relativa
facilidad. Los hábitos son propios de todos los tipos de actividad,
tanto de la exterior (por ejemplo, los hábitos motrices) como de la
interior (por ejemplo, las acciones mentales automáticas). Los
hábitos no son sólo resultado, sino también condición de la actividad
creadora del hombre.

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