2-Partículas elementales

Partículas elementales

No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946

No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959

Diccionario filosófico · 1965:353

Partículas “elementales”

Son los microobjetos más sencillos que actualmente se conocen y que
actúan entre sí como un todo único en todos los procesos conocidos. A
las partículas “elementales” estables, pertenecen: los gravitones
(cuantos hipotéticos del campo gravitatorio), los fotones, el
neutrino, el antineutrino, los electrones, los positrones, los
protones y los antiprotones. En estado libre, se desintegran en
partículas estables: los mesones (de diversas masas), los neutrones,
los antineutrones, los hiperones y los antihiperones. Actualmente, se
conocen más de treinta variedades de partículas “elementales”. Casi a
cada partícula “elemental” le corresponde su antipartícula, que posee
la misma masa, el mismo espin y el mismo tiempo de vida, pero tiene de
signo opuesto la carga eléctrica, el momento magnético, la extrañeza y
otras propiedades. Las partículas “elementales” no constituyen los
últimos “ladrillos” del universo. La materia es inagotable y los
niveles de su organización, cualesquiera que sean, poseen una
estructura compleja, no pueden considerarse como elementos simplísimos
e indivisibles del mundo. “El electrón es tan inagotable como el
átomo” (Lenin). A las partículas “elementales” les es inherente una
inagotable diversidad de propiedades e interacciones; dichas
partículas son inseparables de los diferentes campos materiales que
entran orgánicamente en su estructura. Gracias a su conexión
indisoluble con los campos, las “partículas elementales” poseen al
mismo tiempo propiedades corpusculares y ondulatorias. La peculiaridad
más importante de las partículas “elementales” consiste en que pueden
transmutarse unas en otras: desintegración de las partículas
inestables, transformación de las partículas y antipartículas en
fotones y otras particular “elementales”. Todo ello indica que esas
partículas poseen una estructura extraordinariamente compleja. No es
posible considerar todos los procesos de desintegración de las
partículas como descomposición de un sistema mecánico en sus elementos
componentes, incluidos en él como tales. Se trata de la transmutación
cualitativa de las partículas “elementales” de unas formas en otras,
transmutación relacionada con la generación de nuevas partículas de un
mismo grado de complejidad. Gracias a la constante interacción entre
ellas mismas y con distintos campos, las partículas “elementales”
experimentan ininterrumpidas transformaciones internas, y sus
propiedades son, estadísticamente, propiedades medias en el
tiempo. Las investigaciones teóricas y experimentales que se realizan
actualmente en la física de las partículas “elementales” se encaminan
hacia la aclaración de su estructura específica, así como hacia el
descubrimiento de las leyes que permiten elucidar los distintos
significados de las propiedades de dichas partículas, sus
interacciones y sus tipos de transformación.

Diccionario de filosofía · 1984:327-328

Partículas elementales

Los microbjetos más simples que conocemos actualmente y que
interaccionan como algo único en todos los procesos conocidos. Las
partículas elementales componen los demás tipos de la materia: átomos,
moléculas, cuerpos macroscópicos, sistemas cósmicos. En el presente se
han establecido más de 200 variedades de partículas elementales, pero
en su inmensa mayoría son inestables, surgen en el curso de las
interacciones de gran energía y se disgregan rápidamente. Casi cada
una de las partículas elementales tiene su correspondiente
antipartícula, que se diferencia de aquélla por el signo de la carga
eléctrica y por algunas otras propiedades cuánticas. La transformación
mutua de las partículas elementales atestigua que éstas tienen una
estructura sumamente compleja. Las partículas elementales son
inseparables de los campos materiales –gravitacional,
electromagnético, nuclear y otros–, que forman parte de su
estructura. Es propia de la materia la unidad de la discontinuidad y
la continuidad en la estructura, la dislocación espacial y el
movimiento. El descubrimiento de la física de las partículas
elementales reveló nuevos aspectos de la infinitud estructural de la
materia. Tiene gran importancia la creación en perspectiva de una
teoría única de las partículas elementales y los campos, que permita
comprender más a fondo sus propiedades y formas de interacción.

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