2-Politeísmo y monoteísmo

Politeísmo y monoteísmo

No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946

No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959

Diccionario filosófico · 1965:366

Politeísmo y monoteísmo

(del griego πολύς: mucho, y θεός: dios; y μόνος: único, y θεός: dios.)
Adoración de varios dioses o de un solo dios. El politeísmo surge del
totemismo, del fetichismo y del animismo en el estadio de
descomposición de la comunidad primitiva. La creencia en una
multiplicidad de fetiches de una misma jerarquía y de espíritus, es
sustituida por la creencia en dioses que reciben imagen concreta,
nombre y culto. En la jerarquía de los dioses, se reflejaban la
división social del trabajo, las relaciones terrenas de dominio y
subordinación. El ulterior fortalecimiento del régimen de esclavitud,
la creación de monarquías, llevó desde el principio a una veneración
única, al culto de un solo dios, con la particularidad de que se
reconocía la existencia de otros dioses. Del panteón de los dioses se
destaca luego un dios único, omnipotente, copia del monarca terreno;
se afirma el monoteísmo; pero no existe el monoteísmo puro. Incluso en
religiones monoteístas como el islamismo y el judaísmo, se observan
huellas de politeísmo, sin hablar ya del cristianismo, con su
trinidad, la madre de Dios y una gran cantidad de santos.

Diccionario de filosofía · 1984:340

Politeísmo y monoteísmo

(griego poly: mucho, monos: uno, y theios: dios.) Veneración de varios
dioses o de uno solo. El politeísmo surge del totemismo, del
fetichismo y del animismo en la fase de descomposición de la comunidad
primitiva. La fe igual en un conjunto de fetiches o espíritus es
sustituida por la fe en los dioses, que reciben fisonomía concreta,
nombre y culto. En la jerarquía de los dioses hallaron su expresión
lejana la división social del trabajo y las relaciones terrenales de
dominio y sometimiento. El fortalecimiento sucesivo del régimen
esclavista y la fundación de las monarquías condujo inicialmente a la
veneración y culto de un solo dios, pero se reconocía la existencia de
otros dioses. Luego, del panteón de dioses se destaca un Dios único y
todopoderoso, copia del rey terrenal, con lo que se afianza el
monoteísmo. Pero este último no existe en forma pura. Hasta en
religiones tan monoteístas como son el Islam y el Judaísmo se
advierten las huellas del politeísmo, sin hablar ya del cristianismo
con su Trinidad, su Virgen y numerosos santos.

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