4-Previsión científica

Previsión científica

Diccionario filosófico marxista · 1946:245-246

Previsión científica

Previsión científica significa la previsión de fenómenos, sucesos y
procesos que pueden o deben surgir en el futuro. La posibilidad de la
previsión científica se basa en el conocimiento de las conexiones
internas necesarias de las cosas y de los procesos, de su
condicionamiento mutuo, de las tendencias que llevan implícitas, en el
conocimiento de las leyes que rigen el desarrollo de la realidad. Las
ciencias naturales y sociales dan múltiples ejemplos de
previsión. Así, por ejemplo, el famoso químico ruso Mendeleev (ver),
partiendo del análisis de la tabla de los elementos químicos, supuso
la existencia de tres elementos aún no hallados, determinando además
sus propiedades, su peso atómico, etc.; previsión que fue plenamente
confirmada después por el descubrimiento de los elementos: germanio,
galio y escandio. Sobre el conocimiento de las leyes que rigen el
desarrollo de los organismos se basa la previsión del nacimiento de
nuevas especies vegetales, artificialmente creadas por los
seleccionadores. En el terreno de la vida social, los pronósticos
científicos históricos se han hecho posibles desde el momento en que
Marx y Engels crearon la ciencia sobre las leyes que rigen la
evolución social. “Marx, escribe Lenin, plantea el problema del
comunismo como el naturalista plantearía, por ejemplo, el problema del
desarrollo de una nueva especie biológica; sabiendo que ha surgido de
tal y tal modo y se modifica en tal y tal dirección
determinada”. Sobre la base del ulterior desarrollo del marxismo
aplicado a la nueva época histórica y sobre el conocimiento de las
leyes del desarrollo del imperialismo, Lenin y Stalin hicieron una
serie de previsiones científicas, brillantemente confirmadas en el
curso de la revolución proletaria. Tal es la genial previsión de Lenin
sobre la posibilidad, bajo las condiciones del imperialismo, del
triunfo del socialismo primeramente en un solo país; tal es la
previsión stalinista sobre las rutas del desarrollo y del triunfo de
la colectivización de la economía rural en la URSS, etc. El
conocimiento de las leyes del desarrollo social da la posibilidad de
prever, no sólo el rumbo general y el resultado del movimiento, sino
también la de fijar con mayor o menor aproximación los propios plazos
de la sucesión de los acontecimientos, aunque en el terreno de la vida
social esta previsión es inmensamente más complicada que en el terreno
de las ciencias naturales. En la astronomía, por ejemplo, se puede
predecir cien años antes la fecha de un eclipse solar. Sin embargo, el
conocimiento de las leyes del desarrollo social da también la
posibilidad de prever, en el terreno de la vida social, el momento de
sucesión de determinados acontecimientos históricos. Como lo confirma
la historia del Partido Bolchevique, el conocimiento de las leyes de
la dialéctica, el conocimiento de las leyes de la evolución social, de
las leyes de la revolución y de la lucha política, ha permitido al
Partido del proletariado determinar inequívocamente los momentos de la
acción histórica. La elección correcta de tales momentos es una de las
condiciones más importantes para llevar con éxito la dirección
estratégica. “El incumplimiento de esta condición, enseña Stalin,
conduce a un error peligroso, llamado ‘la pérdida del ritmo’”. La
realización de la insurrección armada de Octubre de 1917 representa un
formidable y claro ejemplo de la elección correcta del momento,
científicamente exacta. El Partido Bolchevique triunfó también porque
en su lucha se alumbraba el camino con la doctrina revolucionaria de
Marx, Engels, Lenin y Stalin, que da una previsión científica del
curso y del desenlace de los acontecimientos.

Diccionario filosófico abreviado · 1959:419-420

Previsión científica

Previsión fundada en el conocimiento de las leyes objetivas de la
ciencia, de los fenómenos, acontecimientos y procesos que pueden o
deben producirse. Sólo el conocimiento de las leyes objetivas de la
realidad permite ver el desarrollo de los acontecimientos no sólo en
el presente, sino también en el porvenir. Quienes niegan el carácter
objetivo de las leyes, niegan también la posibilidad de previsión
científica. Las ciencias de la naturaleza y las ciencias sociales,
suministran numerosos ejemplos de previsión. Así, el eminente químico
ruso Mendeleiev (ver), fundándose en la ley periódica que había
descubierto, supuso que existían tres elementos todavía desconocidos y
definió sus propiedades (peso atómico, etc.), previsión enteramente
confirmada por el descubrimiento del germanio, el galio y el
escandio. Cuando se conocen las leyes del desarrollo de los
organismos, se puede prever la aparición de nuevas variedades de
plantas creadas artificialmente por el seleccionador. En la vida
social, los pronósticos sobre la marcha de la historia se hicieron
posibles una vez que Marx y Engels hubieron fundado la ciencia de las
leyes del desarrollo de la sociedad. El marxismo refuta las teorías
reaccionarias de los sociólogos burgueses que niegan la posibilidad de
prever los acontecimientos históricos con una precisión
científica. Marx no sólo predijo que la sociedad comunista
reemplazaría al capitalismo, sino que previó los rasgos esenciales de
la sociedad futura. Al predecir la desaparición ineluctable del
capitalismo y la victoria de un orden social superior, el socialismo,
Marx se apoyaba en la ley objetiva que había descubierto: la ley de la
correspondencia necesaria entre las relaciones de producción y el
carácter de las fuerzas productivas (ver). En cierto nivel del
desarrollo del capitalismo, surge una contradicción entre el carácter
social de las fuerzas productivas y las antiguas relaciones de
producción burguesas. Esta contradicción tiene que ser eliminada
poniendo en concordancia las relaciones de producción con el nuevo
carácter de las fuerzas productivas. La revolución socialista hace
cumplir esta necesidad histórica. Al desarrollar la doctrina marxista
y al adaptarla a una nueva época histórica, la del imperialismo y de
las revoluciones proletarias, Lenin previó genialmente la posibilidad
de la victoria del socialismo en un país aislado. Esta previsión ha
sido ampliamente confirmada por la experiencia de la edificación del
socialismo en la U.R.S.S.

El conocimiento de las leyes del desarrollo social, permite no sólo
prever la tendencia general y el resultado final del movimiento, sino
determinar con una exactitud más o menos grande el momento en que los
acontecimientos se desenvuelven. Es infinitamente más difícil situar
de antemano los acontecimientos en el dominio de la vida social que en
el de las ciencias de la naturaleza. En astronomía, por ejemplo, se
puede predecir un eclipse solar con varios siglos de anticipación. Sin
embargo, el conocimiento de las leyes objetivas del desarrollo de la
sociedad, permite prever el momento en que debe tener lugar tal o cual
acontecimiento histórico, y luchar por su realización. El
marxismo-leninismo enseña que no es suficiente prever el porvenir,
sino que es preciso conquistarlo. La historia del Partido Comunista de
la Unión Soviética muestra que el conocimiento de las leyes del
desarrollo social, de las leyes de la revolución y de la lucha
política le ha permitido determinar sin error el momento de actuar. La
elección juiciosa de un momento semejante constituye una de las
condiciones esenciales para el éxito en la dirección estratégica de
las operaciones. La preparación de la insurrección armada de Octubre y
su realización, constituyen un excelente ejemplo de elección juiciosa
y científicamente exacta del momento de la acción. Si el Partido
Comunista resultó victorioso fue precisamente porque en su lucha se
inspiraba en la doctrina revolucionaria del marxismo-leninismo, que
permite prever científicamente el curso y el resultado final de los
acontecimientos.

En la época actual, apoyándose en el conocimiento de las leyes
objetivas del socialismo, el Partido Comunista muestra al pueblo
soviético el camino de la coronación de la edificación socialista y de
la construcción gradual del comunismo integral en la U.R.S.S.

Diccionario filosófico · 1965:373-374

Previsión científica

Predicción de fenómenos de la naturaleza y de la sociedad –no
observados ni establecidos aún experimentalmente– basada en la
generalización de datos teóricos y experimentales y en la
consideración de las leyes objetivas del desarrollo. Las previsiones
científicas pueden ser de dos tipos: 1) relativas a fenómenos
desconocidos, no registrados en la experiencia, pero existentes
(verbigracia, la predicción de las antipartículas, la de nuevos
elementos químicos, etc.); 2) relativas a fenómenos que han de surgir
en el futuro si se dan determinadas condiciones (verbigracia, la
predicción de Marx y Engels sobre la inevitabilidad del hundimiento
del capitalismo y de la victoria de la formación comunista, la
conclusión de Lenin acerca de la posibilidad de que el socialismo se
edificase en un solo país, las tesis del programa del P.C.U.S. sobre
los rasgos fundamentales del futuro régimen comunista y los caminos
para alcanzarlo). La previsión científica siempre se basa en hacer
extensivas leyes conocidas de la naturaleza y de la sociedad a una
esfera de fenómenos desconocidos o aún sin aparecer, donde las leyes
en cuestión han de conservar su vigencia. La previsión científica
también contiene, inevitablemente, elementos de conjeturas de
probabilidad, ante todo en relación con los acontecimientos concretos
del futuro y sus plazos. Ello está condicionado por la aparición –en
el proceso de desarrollo– de nexos causales cualitativamente nuevos y
de posibilidades no existentes con anterioridad; en lo que respecta a
la sociedad, se halla condicionado por la singular complejidad de los
procesos de su desarrollo, ya que en la sociedad actúan hombres
dotados de conciencia, caracteres individuales, etc., lo cual da origen
a situaciones inesperadas. El criterio ultimo para determinar el
acierto de una previsión científica es siempre la práctica. Negar las
leyes objetivas de la realidad (agnosticismo, escepticismo) lleva
también a negar la previsión científica, lo cual se encuentra
inevitablemente ligado a las teorías idealistas del desarrollo
social. Por el contrario, el reconocimiento de la previsión científica
se apoya en la concepción materialista de la historia.

Diccionario de filosofía · 1984:346

Previsión científica

Predicción –basada en la sintetización de los datos teóricos y
experimentales y en la consideración de las regularidades objetivas
del desarrollo– de los fenómenos de la naturaleza y la sociedad, que
no se observan o no se han establecido todavía por vía
experimental. La previsión científica puede ser de dos géneros: 1)
respecto a los fenómenos desconocidos, no registrados en el
experimento, pero existentes (por ejemplo, predicción de las
antipartículas, de nuevos elementos químicos, de yacimientos de
minerales, etc.) y 2) respecto a los fenómenos que aún deben surgir en
el futuro si se dan determinadas condiciones (por ejemplo, la
predicción por Marx y Engels de la inevitabilidad del hundimiento del
capitalismo y el triunfo del comunismo, la deducción de Lenin acerca
de la posibilidad de construir el socialismo en un solo país). La
previsión científica siempre se asienta en la extensión de las leyes
conocidas de la naturaleza y la sociedad al dominio de los fenómenos
desconocidos o que aún no han surgido, donde dichas leyes deben
mantener su vigor. En la previsión científica figuran inevitablemente
también elementos de las suposiciones probabilísticas, sobre todo con
respecto a los acontecimientos concretos del futuro y sus plazos. Esto
se condiciona por el surgimiento, en el proceso de desarrollo, de
conexiones causales y posibilidades cualitativamente nuevas que no
existían antes, y en lo relativo a la sociedad, por la complejidad
especial de sus procesos de desarrollo. La práctica siempre es, en
última instancia, el criterio de la justeza de la previsión
científica. La negación de las regularidades objetivas de la realidad
(agnosticismo, escepticismo) conduce también a la negación de la
previsión científica, lo cual está enlazado inevitablemente con las
teorías idealistas del desarrollo social. Por el contrario, el
reconocimiento de la previsión científica se basa en la comprensión
materialista de la historia.

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