2-Armonía preestablecida

Armonía preestablecida

No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946

No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959

Diccionario filosófico · 1965:24

Armonía preestablecida

Según esta teoría existen cambios armónicos, establecidos por Dios,
del alma y del cuerpo; falta el nexo de causa y efecto entre el alma y
el cuerpo, pero cada deseo del alma y el correspondiente movimiento
del cuerpo están preestablecidos y predeterminados paralela e
independientemente. La teoría de la armonía preestablecida constituye
una tentativa para superar el dualismo de las substancias espiritual y
material. Se encuentran en Descartes alusiones a la armonía
preestablecida. La teoría aparece claramente formulada en los
ocasionalistas (ocasionalismo) (Gueulincx, Malebranche). El concepto
de “armonía preestablecida” fue algo reelaborado por Leibniz, quien
hablaba de la armonía preestablecida de todas las mónadas en el
universo. Según Leibniz, el mundo y cada uno de los seres que lo
pueblan, se desarrollan según sus propias fuerzas, mas tales fuerzas
han sido creadas y elaboradas por Dios de modo que se pudiera
establecer el mejor orden del mundo.

No figura en el Diccionario marxista de filosofía · 1971

Diccionario de filosofía · 1984:25

Armonía preestablecida

Reconocimiento de las concatenaciones armónicas de causa y efecto y de
la coordinación universal en las esferas material y espiritual
establecidas por Dios. La doctrina de la armonía preestablecida es un
intento de superar el dualismo de las substancias espiritual y
material. Alusiones a la armonía preestablecida figuran en las
concepciones de Descartes y en forma evidente, aparece en las teorías
de los ocasionalistas (Malebranche). Leibniz reelaboró un tanto el
concepto de armonía preestablecida, enseñando que ésta es propia de
todas las mónadas en el Universo. Según Leibniz, el mundo y cada una
de las criaturas que lo componen se desarrollan con sus propias
fuerzas, pero estas últimas fueron creadas y elegidas por Dios de modo
necesario para preestablecer la mejor organización del mundo. En su
idea sobre la conveniencia eterna de todo lo existente, Wolff llevó
hasta el absurdo algunos aspectos de la doctrina leibniziana de la
armonía preestablecida.

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