Marco Tulio Cicerón (106-43 a.n.e.)
No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946
No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959
No figura en el Diccionario filosófico · 1965
Diccionario de filosofía · 1984:62
Orador, filósofo y político de la Roma Antigua. Sus obras
filosóficas, escritas principalmente en forma de diálogo, son
eclécticas. En la teoría del conocimiento, Cicerón se inclina al
escepticismo, considerando que no existe un criterio que permita
diferenciar las representaciones reales de las no reales. Cicerón
centra su atención en los problemas de la ética, expuestos en sus
obras “De finibus Bonorum et Malorum” (45), “Cato maior, or de
senectute”, “De amicitia” (44), “De officiis” (43) y otras. Estudia
los problemas del bien superior, las virtudes como única fuente de la
felicidad, la contradicción entre el deber moral y el provecho
personal, tratando de formular recomendaciones prácticas. Cicerón
llama a seguir la naturaleza congénita en el hombre y sostiene que la
esencia de esta naturaleza sólo la esclarece la filosofía práctica.
Hay que aspirar a la perfección. Se corresponden con esta aspiración
cuatro virtudes: la sabiduría, la justicia, el valor y la moderación.
En las obras políticas (“De Republica”, 54-51, y “De legibus”, 52),
Cicerón se inclina a la conclusión de que es necesaria la fusión de
los principios monárquico, aristocrático y democrático en la actividad
del Estado y opina que la Constitución romana satisface esta demanda.