Timofiéi Nikoláievich Granovski (1813-1855)
No figura en el Diccionario filosófico marxista · 1946
No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959
Diccionario filosófico · 1965:206
Historiador y sociólogo ruso, profesor de la Universidad de Moscú
(1839-55), una de las figuras más destacadas del occidentalismo
(Occidentalistas, Eslavófilos). Sobre sus concepciones teóricas
generales influyeron Stankévich, Belinski y Herzen; Granovski se
incorporó, asimismo, las ideas capitales de la filosofía clásica
alemana. Según él, el proceso histórico se halla rigurosamente sujeto
a ley. Ésta es entendida por Granovski como un fin ideal, moral, en
cuya realización puede desempeñar un gran papel la personalidad, si
bien no es posible negar que también en las mismas “masas existe
cierto sentido histórico”. Desde este punto de vista, rechaza el
fatalismo como doctrina que releva al hombre de toda responsabilidad
moral. Sus ideas acerca del devenir histórico (a las que eran
inherentes elementos de dialéctica) evolucionaron: Granovski se fue
inclinando cada vez más del idealismo hacia el naturalismo;
consideraba que la historia ha de tomar de la ciencia natural sus
métodos de investigación. En la explicación de los fenómenos sociales
confería suma importancia a las condiciones geográficas. Era
partidario de la monarquía constitucional; desde posiciones liberales,
se manifestó contra el régimen de servidumbre. Granovski ejerció una
fecunda influencia sobre la sociedad y la ciencia histórica rusas.
Diccionario de filosofía · 1984:197-198
Historiador y sociólogo ruso, destacado representante del
occidentalismo (Occidentalistas, Eslavófilos). Sobre los puntos de
vista histórico-generales de Granovski ejercieron influencia
Stankévich, Belinski y Herzen. Granovski asimiló también las ideas
fundamentales de la filosofía clásica alemana, sobre todo las de
Hegel, rechazando, cierto es, su esquema lógico. Según Granovski, el
proceso histórico, que incluye también las revoluciones en la
sociedad, es rigurosamente lógico. Entiende la ley como un fin ideal,
moralmente racional, en cuya realización juegan un gran papel no sólo
los pueblos, sino, también, algunas personalidades. Desde este punto
de vista, Granovski rechaza el fatalismo como doctrina que libera al
hombre de la responsabilidad moral. Las opiniones de Granovski sobre
el desarrollo histórico (a las que eran propios elementos de la
dialéctica) fueron evolucionando: él se inclinaba cada vez más del
idealismo al naturalismo, considerando que la historia debe tomar de
las ciencias naturales su método de investigación. En la explicación
de los fenómenos sociales atribuía gran importancia a las condiciones
materiales, ante todo, geográficas. Granovski fue partidario de la
monarquía constitucional; con óptica iluminista liberal se pronunciaba
contra el régimen de servidumbre. Ejerció una considerable influencia
sobre la sociedad rusa y la ciencia histórica rusa. Definió sus
puntos de vista en la obra Acerca del estado actual y la importancia
de la historia universal (1852).