MORELLY

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Diccionario filosófico marxista · 1946:225

Morelly

Morelly fue el más grande comunista utópico francés del siglo XVIII.
No tenemos datos biográficos de Morelly (ni siquiera la fecha de su
nacimiento y de su muerte). Todas sus obras aparecieron en forma
anónima. En su poema Basiliada (1753) y particularmente, en su
trabajo principal Código de la Naturaleza, o el verdadero espíritu de
sus leyes (1755), Morelly expone una visión del régimen comunista,
Morelly es el representante más preclaro de la línea democrática en el
movimiento “ilustrado” francés. Su idea central es la exigencia
resuelta de la supresión de la propiedad privada. La propiedad
privada es la fuente de todos los males sociales; debe ser abolida,
dice Morelly. “Allí donde no hubiera habido ninguna propiedad,
tampoco habría existido ninguno, de sus efectos perniciosos”. Morelly
veía en la insuficiente ilustración de los hombres y en el error
admitido por los legisladores, la causa más importante del surgimiento
de la propiedad privada, es decir, dio a este problema una
interpretación idealista. El progreso de las ideas de la ilustración
es la garantía del retorno al régimen natural. El comunismo, según
Morelly, es un régimen que corresponde al código de la Naturaleza. Su
base constituye la propiedad social. El mayor mérito histórico de
Morelly radica en haber llegado a la comprensión de la necesidad de la
propiedad social. En su utopía están ausentes el comercio y el
intercambio. Cada individuo recibe los productos que necesita
directamente de quienes los producen. Todos los ciudadanos tienen el
derecho al trabajo, al descanso, a la instrucción, a la protección de
la salud, y al auxilio material en la vejez. El trabajo tiene un
carácter obligatorio general, pero al alcanzar una edad determinada
cada ciudadano puede dedicarse a cualquier clase de trabajo. Morelly
atribuye un gran valor a la educación social de los niños. A partir
de la edad de 5 años, todos los niños son recogidos en una casa
especial en la que son educados en condiciones completamente iguales
(mujeres y varones por separado). La tarea fundamental de la
educación es la formación de altas cualidades ciudadanas. El estudio
teórico se complementa con el estudio de la producción. La limitación
histórica de las concepciones de Morelly se manifestó claramente en la
igualdad primitiva predicada por él (hasta la obligación de construir
todas las casas de la misma forma, y para todos los hombres hasta la
edad de 30 años de vestir con el mismo género). En todo ello, como en
su incomprensión de las condiciones efectivas de la supresión de la
propiedad privada, se evidencia el exiguo desarrollo de las relaciones
económico-sociales de clase en la época de Morelly. Su teoría utópica
ejerció gran influencia sobre las concepciones de los babeufistas,
Fourier, Cabet y otros.

Diccionario filosófico abreviado · 1959:367-368

Morelly

Comunista utópico francés del siglo XVIII. No se sabe nada de su vida
(se ignoran hasta los datos de su nacimiento y de su muerte). Todas
las obras de Morelly son anónimas. Su poema Basiliada (1753) y, sobre
todo, su obra principal, el Código de la naturaleza o el verdadero
espíritu de sus leyes (1755) están dedicados a la descripción de la
sociedad comunista del porvenir. Morelly es un representante típico
de la tendencia democrática en la filosofía francesa del siglo XVIII.
Reivindica resueltamente la abolición de la propiedad privada en la
cual ve la fuente de todos los males sociales. “Donde no exista
ninguna propiedad”, escribe, “no puede existir ninguna de sus
perniciosas consecuencias”. Morelly ofrece una explicación idealista
del origen de la propiedad privada: nivel insuficiente de la
instrucción, errores de los legisladores, etc. Penetrar el verdadero
sentido de las leyes de la naturaleza humana es, según él, asegurar el
retorno al orden natural. El comunismo es el régimen conforme al
“código de la naturaleza”. Su fundamento es la propiedad colectiva.
El mérito histórico de Morelly consiste en haber comprendido la
necesidad de la propiedad colectiva.

En su estado utópico no existe ni comercio ni intercambio. Cada uno
obtiene los productos de que tiene necesidad. Todos los ciudadanos
tienen derecho al trabajo, al reposo, a la instrucción, a la
asistencia médica, así como también a la ayuda material en la vejez.
El trabajo es obligatorio para todos, pero, a partir de una edad
reglamentaria, cada uno puede elegir un trabajo a su gusto. Morelly
asigna una importancia considerable a la educación colectiva de los
niños. Desde los cinco años, todos son colocados en establecimientos
en los cuales son educados en condiciones de igualdad absoluta
(muchachos y muchachas separadamente). La tarea esencial de la
educación, es la formación de elevadas cualidades cívicas. La
instrucción teórica es completada por la actividad práctica. La
estrechez histórica de las concepciones de Morelly se manifiesta
netamente en su igualitarismo primitivo (llega hasta a exigir que
todas las casas sean uniformes y que todos, de los 10 a los 30 años,
usen vestidos del mismo paño). Todo esto, así como su ignorancia de
las verdaderas condiciones de la abolición de la propiedad privada y
de los medios revolucionarios para cambiar el antiguo orden social, se
explica por el débil desarrollo de las relaciones económicas y
sociales de las clases en esa época. La teoría utópica de Morelly
ejerció una gran influencia sobre los partidarios de Babeuf, sobre
Fourier (ver), Cabet (ver) y otros.

Diccionario filosófico · 1965:326

Morelly (siglo XVIII)

Último representante del denominado comunismo “racionalista”. Su obra
principal, Código de la naturaleza (1755), está consagrada a exponer
los fundamentos de una sociedad en que impera la propiedad colectiva.
En sus razonamientos teóricos, Morelly parte del racionalismo,
contraponiendo el orden social sensato al irracional. El régimen
moderno es absurdo, es fruto del extravío. Es necesario “descubrir”
teóricamente un régimen nuevo, racional, que corresponda a la
naturaleza del hombre, y sus principios han de darse a conocer a los
hombres. Morelly concibe el régimen racional a modo de comuna
económica centralizada, regida sobre la base de un plan económico
único que regule la producción y la distribución. Formuló tres leyes
fundamentales para la sociedad que responda a los mandatos de la
naturaleza y de la razón: 1) abolición de la propiedad privada, 2)
“derecho a la existencia” y “derecho al trabajo”, 3) trabajo
obligatorio para todos los ciudadanos. Morelly es un típico
representante del comunismo toscamente nivelador. Propugna la
templanza en la comida, la prohibición de los ornamentos, prevé una
reglamentación minuciosa de la manera de vivir, hasta de las
relaciones conyugales. Ejerció sensible influencia en muchos
socialistas utópicos de los siglos XVIII y XIX, como Babeuf, Cabet,
Blanqui y otros.

Diccionario de filosofía · 1984:300

Morelly (siglo 18)

Representante consecuente del denominado comunismo racionalista. Su
principal obra –Código de la naturaleza (1755)– es un tratado dedicado
a la argumentación de los principios de la sociedad en la que domina
la propiedad colectiva. Consideraba el régimen de aquel entonces como
insensato, como resultado de los extravíos. Morelly se imaginaba el
régimen sensato como una comuna económica centralizada, que se
administra sobre la base de un plan económico único, que regula la
producción y la distribución. Formuló las tres leyes fundamentales de
la sociedad que se corresponde con las exigencias de la naturaleza y
la razón: 1) la anulación de la propiedad privada, 2) el “derecho a la
existencia” y “derecho al trabajo” y 3) el deber de todos los
ciudadanos de trabajar. Morelly fue un representante típico del
comunismo abiertamente igualitario. Abogaba por una reglamentación
detallada de todas las esferas de la vida cotidiana, incluyendo las
relaciones matrimoniales. Ejerció notable influencia sobre muchos
socialistas utópicos de los siglos 18 y 19: G. Babeuf, Cabet, Blanqui
y otros.

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