Dialéctica de la Naturaleza

Dialéctica de la Naturaleza

Diccionario filosófico marxista · 1946:75-76

Título de la obra de Federico Engels, publicada por primera vez en
1925 en la U.R.S.S. Comprende una serie de anotaciones sobre la
filosofía de las ciencias naturales que hizo Engels en el período que
corre entre 1873 y 1883. Engels consideraba que la filosofía del
materialismo dialéctico debe fundamentarse en el conocimiento total de
las ciencias naturales y de las matemáticas y que, a su vez, las
ciencias naturales y las matemáticas sólo pueden desarrollarse
fructíferamente sobre la base del materialismo dialéctico. Dialéctica
de la Naturaleza contiene una profunda investigación filosófica de la
historia de las ciencias naturales y de las matemáticas, y un análisis
de los problemas más importantes de las ciencias naturales desde el
punto de vista de la dialéctica materialista. En esta obra hay una
profunda crítica del materialismo mecanicista, así como de las teorías
idealistas de los sabios naturalistas y matemáticos burgueses y de su
método metafísico. En Dialéctica de la Naturaleza, Engels echa los
cimientos de la teoría de las diversas formas del movimiento de la
materia. Al analizar el desarrollo histórico de las ciencias
naturales y de las matemáticas, demuestra cómo los sabios naturalistas
se ven cada vez más necesitados de pasar del pensamiento metafísico al
dialéctico, lo que se refleja fructíferamente en el desarrollo de las
ciencias naturales. Somete a un detallado análisis filosófico una
serie de leyes fundamentales de las ciencias naturales y descubre su
verdadero sentido y significación. Así Engels demuestra el verdadero
sentido de la ley de conservación de la energía, como ley de la
transformación cualitativa de la energía, declarándola, además, ley
absoluta de la unidad del movimiento universal de la materia. Engels
analiza también el llamado segundo principio de termodinámica y pone
al descubierto la falsedad de la conclusión de este principio (hecha
por los sabios burgueses) de que la Naturaleza tiende hacia su muerte
térmica (es decir, hacia el estado de un equilibrio calorífico, sin
posibilidad de salida por la acción de la propia Naturaleza) y que la
única salvación consistiría en la intervención de una fuerza
extranatural, en dios. Engels analiza profundamente la teoría de
Darwin sobre el origen de las especies, dedicando además una especial
atención a la elaboración del problema del papel del trabajo en la
humanización del mono (Ver: Humanización del mono por el trabajo). En
el terreno de las matemáticas, Engels se ocupa mucho del problema de
la infinitud (de lo infinitamente grande y de lo infinitamente
pequeño), demostrando que nuestras representaciones acerca de la
infinitud reflejan la infinitud de la propia Naturaleza en lo grande y
en lo pequeño, y que la introducción de la cantidad variable en
matemáticas superiores conduce a la penetración de la dialéctica en
las matemáticas. Analiza el importante problema de la casualidad y la
necesidad, el problema de las leyes que rigen la Naturaleza. En este
difícil problema filosófico de las ciencias naturales, con una
formidable maestría dialéctica, Engels descubre la falsedad, tanto del
modo mecanicista, como del modo idealista de abordar este problema y
le da una solución marxista. En general, Dialéctica de la Naturaleza
es el mejor testimonio de cómo el conocimiento de las leyes de la
dialéctica materialista, unido al conocimiento profundo de las
conclusiones especiales de una ciencia determinada, permite hallar
solución correcta a los problemas de principio (filosóficos y
metodológicos) planteados por las ciencias naturales.

Diccionario de filosofía y sociología marxista · 1959:26

Obra de Engels, publicada por primera vez en la U.R.S.S., en 1925. Se
compuso sobre una serie de escritos de Engels, sobre filosofía de las
ciencias naturales en el período de 1873 a 1883. Engels consideraba
que la filosofía del materialismo dialéctico debe fundarse en el
conocimiento general de las ciencias naturales y de las matemáticas.
La Dialéctica de la naturaleza contiene una profunda investigación
filosófica de la historia de las ciencias naturales y de las
matemáticas y un análisis de los problemas más importantes de las
ciencias naturales, del punto de vista de la dialéctica marxista. En
ella se da una crítica del materialismo mecanicista, como también de
las teorías idealistas de una serie de sabios naturalistas burgueses,
y de su método metafísico.

Diccionario filosófico abreviado · 1959:128-129

Obra de Engels escrita de 1873 a 1883 y publicada por primera vez en
la URSS en 1925. Considerando que el materialismo dialéctico debe
tener por fundamento el conocimiento profundo de las ciencias de la
naturaleza y de las matemáticas, y que a su vez, estas ciencias no
pueden progresar más que sobre la base del materialismo dialéctico,
Engels se entrega en esta obra a un estudio filosófico profundo de la
historia y de los problemas esenciales de las ciencias de la
naturaleza y de las matemáticas. Hace una crítica penetrante del
materialismo mecanicista (ver), así como de las teorías idealistas de
los sabios burgueses y de su método metafísico. Perfectamente al
corriente de la ciencia de su tiempo, Engels muestra cómo la
concepción metafísica de la naturaleza, minada desde el interior por
el propio desarrollo de la ciencia, cede el lugar a un método nuevo,
al método dialéctico revolucionario. Engels justifica de una manera
detallada la teoría del materialismo dialéctico sobre las formas del
movimiento de la materia. Al analizar la evolución histórica de las
ciencias de la naturaleza y de las matemáticas, prueba que los hombres
de ciencia se ven obligados a pasar, cada vez más frecuentemente, del
método metafísico al método dialéctico, lo que ejerce una influencia
provechosa en el progreso de las ciencias. Engels estudia
detalladamente las leyes fundamentales de las ciencias de la
naturaleza y revela su carácter dialéctico. Así, pone en claro el
verdadero sentido de la ley de la conservación de la energía como ley
de transformación cualitativa de la energía, y la designa como ley
absoluta de la naturaleza. Examina igualmente lo que se llama el
segundo principio de la termodinámica, y denuncia la mentira de
algunos científicos burgueses que pretenden que el universo se
encamina hacia la muerte térmica, teoría que está en contradicción con
la ley de la conservación y de la transformación de la energía.
Analiza la teoría de Darwin (ver) sobre el origen de las especies, y
pone en evidencia sus lagunas y sus errores. En numerosos puntos, las
opiniones de Engels se ven confirmadas brillantemente por la doctrina
michurinista (ver), que ha superado la estrechez del darwinismo.
Engels presta especial atención al papel del trabajo en la formación y
el desarrollo del hombre. Se interesa vivamente por el problema del
infinito matemático y demuestra que nuestra noción del infinito
refleja el infinito de la propia naturaleza en lo infinitamente grande
e infinitamente pequeño. La dialéctica ha hecho irrupción en las
matemáticas superiores con la introducción de la magnitud variable.
En lo que respecta a la correlación de la necesidad y de la
casualidad, Engels refuta la concepción mecanicista de igual modo que
la idealista y ofrece la solución marxista de ese problema complicado.
En su lucha contra los idealistas, defiende y enriquece la doctrina
marxista del carácter objetivo de las leyes de la naturaleza. Sin
duda, ciertos detalles relacionados con problemas especiales, han
caducado a la luz de los nuevos descubrimientos, pero en su conjunto,
esta obra constituye la prueba mejor de que el conocimiento de las
leyes de la dialéctica materialista, aliada al estudio de las diversas
ciencias, permite resolver acertadamente los problemas filosóficos
planteados por las ciencias de la naturaleza. Ciertas tesis expuestas
en ese libro, se han anticipado en varias décadas al desarrollo de las
ciencias. Este libro es un modelo de análisis dialéctico de los
problemas complejos de las ciencias naturales, y enseña a los
filósofos y a los hombres de ciencia a mostrarse intransigentes con
toda manifestación de idealismo y de misticismo en las ciencias, y con
toda tendencia contraria a los principios dialécticos en el dominio
del conocimiento.

La obra Dialéctica de la naturaleza se compone de notas y fragmentos
destinados al uso personal, cosa que hay que tener en cuenta cuando se
la estudia.

Diccionario filosófico · 1965:120-121

Obra de Engels, publicada por primera vez en la U.R.S.S. (1925). Se
compone de una serie de escritos (1873-86) sobre los problemas más
importantes, de la dialéctica de la naturaleza. Engels consideraba
que la filosofía del materialismo dialéctico debía basarse en el
conocimiento de las ciencias naturales en todos sus aspectos, y que
estas ciencias, a su vez, sólo pueden desarrollarse fecundamente sobre
la base del materialismo dialéctico. En la “Dialéctica de la
naturaleza” se halla una profunda investigación filosófica de la
historia y de los problemas capitales de la ciencia natural. Una
crítica del materialismo mecanicista, del método metafísico, así como
de las concepciones idealistas en la ciencia natural. Muy versado en
la ciencia de su época. Engels mostró cómo la concepción metafísica
de la naturaleza se quiebra interiormente debido al propio avance de
la ciencia y ha de ceder su puesto al método dialéctico: señaló,
asimismo, cómo los naturalistas se ven obligados cada día más a pasar
del pensamiento metafísico al dialéctico, lo cual se refleja muy
fecundamente en la misma ciencia natural. Engels expuso, dándole un
amplio y sólido fundamento, la teoría materialista dialéctica sobre
las formas del movimiento de la materia; en consonancia con esta
teoría, investigó los principios relativos a la clasificación de las
ciencias naturales, estableció su clasificación concreta, a la que se
atuvo al estructurar su trabajo. Engels sometió a una circunstanciada
investigación filosófica las leyes fundamentales de la ciencia natural
y puso de manifiesto el carácter dialéctico de dichas leyes. Así
mostró el auténtico sentido de la ley de la conservación y
transformación de la energía, a la que denominó ley absoluta de la
naturaleza. Examinó también el llamado segundo principio de la
termodinámica e hizó ver la falsedad de la conclusión según la cual el
universo se encamina hacia su muerte térmica (“Muerte térmica” del
universo). Luego, analizó Engels con gran profundidad la teoría de
Darwin sobr el el origen de las especies y demostró que el contenido
principal de la misma –la teoría del desarrollo- concuerda por
completo con la dialéctica materialista. Al mismo tiempo, descubrió
en la teoría darviniana ciertas lagunas e insuficiencias. Dedicó
mucha atención al estudio del papel del trabajo en la formación y
desarrollo del hombre. Demostró, asimismo, que los conceptos y
operaciones matemáticos son un reflejo de las relaciones que se dan
entre cosas y procesos en la naturaleza misma, donde aquellos tienen
sus prototipos reales; señalo que la introducción de la magnitud
variable en la matemática superior significa que entra en ésta la
dialéctica. Engels investigó la relación entre casualidad y
necesidad. Con admirable maestría dialéctica puso de relieve el error
tanto de la posición mecanicista como de la idealista en el enfoque de
este complejo problema y le dio una solución, marxista; puso de
manifiesto, tomando como ejemplo la teoría darviniana, que la propia
ciencia natural confirma y concreta las tesis de la dialéctica. Claro
está que algunas cuestiones particulares que se relacionan con
problemas especiales de la ciencia natural y que fueron tratados por
Engels en su “Dialéctica de la naturaleza” han envejecido, y no podían
dejar de envejecer, dado el enorme progreso de la ciencia; pero la
manera materialista dialéctica de proceder análisis de las cuestiones
científicas y generalizarlas filosóficamente, e por entero su
actualidad en ni días. Muchas de las tesis de la obra se han
anticipado en decenios al desarrollo de la ciencia natural. El libro
constituye un modelo de cómo han de enfocarse díalécticamente los
complicados problemas de dicha ciencia. Engels no había preparado
para la imprenta su “Dialéctica de la naturaleza”, que consta de
artículos independientes, notas y fragmentos, hecho que se ha de tener
en cuenta al proceder al estudio de la obra.

Diccionario de filosofía · 1984:117

Obra inacabada de Engels, publicada por primera vez en 1925 en la
URSS. Consta de una serie de anotaciones (1873-86) dedicadas al
estudio de los problemas más importantes de la dialéctica de las
ciencias naturales. Engels consideraba que la filosofía
dialéctico-materialista debe apoyarse en la generalización de los
principales resultados obtenidos no sólo por las ciencias sociales,
sino, también, por las naturales y que, a su vez, las ciencias
naturales pueden desarrollarse fecundamente tan sólo sobre la base del
materialismo dialéctico. En La dialéctica de la naturaleza se ofrece
una profunda investigación filosófica de la historia y de las
cuestiones fundamentales de las ciencias naturales y se critican el
mecanicismo y el método metafísico, así como las concepciones
idealistas y agnósticas en las ciencias naturales. Profundo conocedor
de la ciencia de su tiempo, Engels muestra que la concepción
metafísica de la naturaleza la socava desde dentro el desarrollo mismo
de la ciencia y que los naturalistas se ven obligados cada vez más a
pasar del pensamiento metafísico al dialéctico. Engels desarrolló la
doctrina dialéctico-materialista de las formas de movimiento de la
materia y, de acuerdo con ello, formuló los principios de la
clasificación de las ciencias naturales y propuso su propia
clasificación, en la cual se basa La dialéctica de la naturaleza.
Investigó con detalle las leyes fundamentales del desarrollo de las
ciencias naturales, descubriendo el carácter dialéctico de las mismas.
Mostrando el sentido de la ley de la conservación y transformación de
la energía, Engels analizó el segundo principio de la termodinámica y
demostró que era falsa la conclusión acerca de la futura muerte
térmica del Universo. Engels analizó a fondo la doctrina de Darwin
acerca del origen de las especies y mostró que su principal contenido
–teoría del desarrollo– concuerda por completo con la dialéctica
materialista. Prestó gran atención al estudio del problema del papel
del trabajo en el devenir del hombre. Hizo ver también que los
conceptos y operaciones matemáticos reflejan las relaciones de las
cosas y los procesos en la naturaleza misma, donde tienen sus
prototipos reales, y señaló que la introducción de la variable
significaba la penetración de la dialéctica en las matemáticas.
Investigó el problema de la correlación entre la casualidad y la
necesidad, poniendo de relieve el carácter erróneo de los enfoques
tanto mecanicista como idealista y, sobre la base de la doctrina de
Darwin, mostró que las ciencias naturales mismas concretizan las tesis
correspondientes de la dialéctica. Algunas cuestiones particulares en
La dialéctica de la naturaleza, referidas a problemas específicos de
las ciencias naturales, no podían menos de envejecer debido al
progreso de la ciencia, pero el enfoque dialéctico-materialista que
utiliza Engels para analizar los problemas de las ciencias naturales y
sintetizarlos filosóficamente conserva su significación también en
nuestros días. Muchas tesis de La dialéctica de la naturaleza
anticiparon el desarrollo de las ciencias naturales por decenios
enteros. Esta obra es un modelo de enfoque dialéctico de los
problemas complejos de las ciencias naturales.

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