Ética

Ética

Diccionario filosófico marxista · 1946:107-108

Título de la obra principal del gran filósofo materialista holandés
Benedicto Spinoza (ver), en la cual trabajó más de 12 años
(1662-1675). En esta obra está expuesta la médula de las indagaciones
filosóficas de Spinoza, y por eso su autor la llamaba “Mi filosofía”.
“La Ética demostrada según el orden geométrico” se compone de cinco
partes: en la primera, “De dios”, están expuestas las concepciones
ontológicas de Spinoza, es decir, su doctrina sobre el ser (la
doctrina sobre la sustancia, los atributos y los modos). La
sustancia-materia es una causa de sí misma (causa sui) y la causa de
la existencia y de la esencia de todas las cosas. Los atributos –las
propiedades esenciales, inalienables, de la sustancia– son
innumerables, aunque Spinoza sólo menciona dos: la extensión y el
pensamiento. Las cosas constituyen los modos, o las manifestaciones
de los atributos de la sustancia. La sustancia-materia y los
atributos que expresan su naturaleza son eternos e infinitos. En la
segunda parte, “De la naturaleza y del origen del alma”, se trata la
teoría del conocimiento. El alma es la idea de nuestro cuerpo y sólo
existe en unidad con este último. Todos nuestros conocimientos son el
resultado de la acción del mundo exterior sobre nuestro cuerpo y, por
consiguiente, también sobre nuestra alma. A consecuencia de ello, el
orden y la conexión de las ideas son los mismos que los de las cosas.
En la tercera parte, “Del origen y de la naturaleza de las
afecciones”, está expuesta la teoría psicológica de Spinoza. El mundo
exterior, al obrar sobre nuestro cuerpo, o aumenta su capacidad para
la acción, o la disminuye; en otras palabras, eleva o rebaja la
vitalidad del cuerpo. En el primer caso, se acompaña de un estado del
alma, o afecto, de placer; en el segundo caso, de descontento. Los
afectos están profundamente cimentados en la naturaleza humana,
expresando su aspiración hacia la autoconservación, y el hombre no
está en condiciones de liberarse de ellos. Al adquirir conciencia de
los afectos, éstos se convierten en deseos. La razón es un afecto
entre otros tantos. En la cuarta parte, “De la servidumbre del hombre
o de la fuerza de las afecciones”, y en la quinta parte, “De la
potencia del entendimiento o de la libertad del hombre”, está expuesta
la doctrina realmente ética de Spinoza, que denomina esclavitud a “la
impotencia humana para domar y restringir los afectos”, mientras que
el dominio sobre ellos lo llama libertad: y todo el problema moral,
desde su punto de vista, se reduce a que el afecto de la razón domine
a todos los restantes, ya que un afecto puede ser vencido por otro si
éste domina con mayor fuerza al hombre. La persecución de que fue
víctima por su actividad filosófica como materialista y ateo, le
impidió a Spinoza editar su Ética en vida. Sólo después de la muerte
del pensador fue publicada en 1677 por sus amigos, constituyendo la
parte central de sus “Obras póstumas”. Pasados unos meses, las “Obra.
póstumas” de Spinoza fueron prohibidas por un decreto del 28 de julio
de 1678, como obras que contienen “doctrinas ateas y que se burlan de
las cosas sagradas”.

No figura en el Diccionario filosófico abreviado · 1959

No figura en el Diccionario filosófico · 1965

No figura en el Diccionario de filosofía · 1984

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