El PCE de Ciudad Real apoya a los trabajadores de Repsol de Puertollano contra el ERTE presentado por la empresa
Mientras, el presidente ejecutivo de la compañía, Antonio Brufau Niubó, ha sido procesado (imputado) por el espionaje de Villarejo al presidente de Sacyr, Luis del Rivero, por un presunto delito de cohecho activo al contratar al comisario Villarejo con el encargo de espiar a éste para impedirle que se hiciera con el control de la multinacional con la ayuda de la petrolera mexicana Pemex.
El Partido Comunista de España de Ciudad Real ha mostrado su apoyo a todos los trabajadores de Repsol y su rechazo al ERTE presentado por la multinacional y recuerda, además, la necesaria reindustrialización en la ciudad.
Desde el Comité Provincial del PCE en Ciudad Real manifiestan su solidaridad con los trabajadores y las trabajadoras de Repsol ante el ERTE impuesto que afectará a 618 trabajadores de Repsol Petróleo en Puertollano, el 60% de la plantilla. La suspensión de los contratos de trabajo que pretende la patronal tendría una duración de seis meses.
Con las reformas laborales del PSOE y PP, en estos casos, basta la simple notificación de la patronal al comité de empresa para que pueda ponerse en marcha la suspensión o la extinción de los contratos de trabajo, sin que la Administración puede intervenir dictando resolución admitiendo o rechazando la decisión patronal, algo que ocurría antes de las modificaciones legislativas de 2010 y 2012. Las posibilidades de revisión de la medida (ERTE, ERE) en sede judicial son prácticamente nulas con últimas reformas laborales, ya que ahora se autorizan estos expedientes aún en los casos en que la empresa obtenga beneficios.
La empresa alega la caída del consumo del petróleo provocado por la pandemia, y «la incertidumbre sobre cuándo se recuperará la normalidad, derivada fundamentalmente del proceso de vacunación». Sin rubor añade que «es una medida socialmente responsable dirigida a asegurar la transformación eficiente del Complejo Industrial en el horizonte 2025».
Las declaraciones de esta multinacional revelan el propósito de aprovechar como excusa el estado de alarma y las consecuencias de la pandemia, que debilitan la reacción de los trabajadores frente a las agresiones patronales por las restricciones a la movilidad y el temor al contagio, para reestructurar las plantillas con despidos, suspensiones de contrato de trabajo y más regresión en las condiciones de trabajo. Mientras, el presidente ejecutivo de la compañía, Antonio Brufau Niubó, ha sido procesado (imputado) por el espionaje de Villarejo al presidente de Sacyr, Luis del Rivero, por un presunto delito de cohecho activo[1]El País, 15 de abril de 2021. al contratar al comisario Villarejo con el encargo de espiar al directivo de Sacyr para impedirle que se hiciera con el control de la multinacional con la ayuda de la petrolera mexicana Pemex.
Todo esto no son más que excusas, sostiene la dirección del PCE de Ciudad Real. Repsol ha obtenido un beneficio neto de 600 millones en el pasado ejercicio de 2020[2]La Razón, 18 de febrero de 2021.. Tampoco está de más señalar que Antonio Brufau, presidente de Repsol, y Josu Jon Imaz, consejero delegado de la firma, cobraron respectivamente 2,7 millones de euros y más de 3,3 millones de euros el año pasado. Repsol tiene la suficiente solvencia económica como para seguir desarrollando su actividad económica sin necesidad de poner en peligro los puestos de trabajo de sus empleados, matizan desde el PCE de Ciudad Real.

Además, como bien ha señalado el comité de empresa de la refinería de Puertollano, las verdaderas razones que llevan a la compañía petrolera a proponer semejante despropósito son de otra índole. Amedrentar a las trabajadoras y trabajadores para la futura negociación del Acuerdo Marco del Grupo Repsol e influir en un marco normativo con respecto a la transición energética, son las conclusiones que se desprenden de los comunicados que la propia empresa ha divulgado en los medios de comunicación y por la red interna de Repsol.
El martes, 13 de abril, se celebró una importante concentración de trabajadores y vecinos de la localidad ante el Ayuntamiento de Puertollano. Está prevista una marcha desde el complejo industrial a la ciudad para el próximo 23 de abril. En la movilización se expusieron pancartas que aludían «por la industria y el empleo en la comarca de Puertollano, no al ERTE de Repsol», «por la estabilidad en el empleo en la comarca de Puertollano» o «por el futuro del empleo, no al ERTE en la refinería de Puertollano».
En realidad, según el PCE de Ciudad Real, «esta medida unilateral de los ERTE responde a los intereses de los capitalistas y especuladores de Repsol por obtener el máximo beneficio a costa de sus trabajadores y empleados. Los trabajadores y trabajadoras no podemos permitir que el futuro de cientos de familias obreras y de toda la comarca de Puertollano quede en manos de los capitalistas y especuladores de Repsol que solo atienden a sus intereses particulares».
Al mismo tiempo explican que «en las últimas décadas, las privatizaciones de las empresas industriales públicas y también las políticas neoliberales de deslocalización industrial han afectado con especial contundencia a la comarca de Puertollano». Las consecuencias de estos hechos son el aumento del aumento del desempleo, el incremento de la desigualdad y la miseria de la clase trabajadora, la pérdida de población y la degradación y privatización de los servicios públicos.
El PCE de Ciudad Real promueve que todos los trabajadores y los ciudadanos de Puertollano se organicen de forma unitaria por el futuro industrial y económico de la comarca de Puertollano y por la defensa de los puestos de trabajo en Repsol y apoya todas las acciones reivindicativas que desde el comité de empresa del complejo petroquímico de Puertollano decidan llevar a cabo, así como con la ayuda que puedan prestarles a todos los trabajadores en lucha. Al mismo tiempo recuerdan que es necesaria una reindustrialización y la derogación de las reformas laborales de los últimos años.
Corresponsal de Castilla-La Mancha.