Demolition man

La candidatura de Alberto Cubero intenta librar al PCE de la demolición.

«7.713 militantes quedan en el Partido Comunista de España, según los cálculos hechos por la propia organización para establecer los quinientos delegados y delegadas que participarán el mes próximo en el XXI Congreso del partido. Estas cifras, que suponen una pérdida de casi un cuarto de la militancia desde los aproximadamente 10.000 declarados públicamente por el partido al inicio del mandato de Enrique Santiago, corroboran la sangría organizativa que sufre el PCE desde hace décadas, …» ^[1]El Común 06/06/2022

Los datos son los que son, pero la actual dirección, comandada por Enrique Santiago, no parece darse por aludida ni, lo que es más grave, sentirse responsable.

Esta dirección parece empeñada en cabalgar la bola de demolición – Sahara/OTAN/Ucrania, ministerialismo, institucionalismo a ultranza, reformas ligth, desmovilización, análisis mágicos de la realidad, desprecio y vulneración de acuerdos congresuales… – con el claro objetivo de finiquitar, más pronto que tarde, el partido. Pero eso sí, conservando las siglas históricas en su poder para impedir que los comunistas españoles lo rehabiliten como un PCE digno de ese nombre.

El peligro de derrumbe del partido es tal que ha animado a la militancia a organizarse en torno a la candidatura de Alberto Cubero y presentar batalla en las Conferencias de nacionalidad y región, penúltimo intento para parar la carrera a ninguna parte de E. Santiago y su equipo liquidacionista.

Como, por desgracia, ha ocurrido en muchos de los procesos previos a las Conferencias de nacionalidad o región, en el proceso previo a la Conferencia de Canarias el aparato, desaparecido desde tiempo inmemorial, intentó hacer alguna de las suyas, pero, en este caso y por fortuna, la militancia organizada no lo permitió. 

La delegación canaria (5 delegas/os) al XXI Congreso se configuró 4/1 a favor de la “Enmienda a la totalidad”, el documento que avala la candidatura de Alberto Cubero.

La Rioja, Baleares, Castilla y León, Murcia, Extremadura, Asturias, Madrid, Valencia y Galicia, son comunidades donde también la militancia ha sido capaz de resistir los embates de un aparato empeñado en perpetuarse para intentar llevar a término la destrucción emprendida.

Por el contrario, Castilla La Mancha con casi un empate en la delegación al XXI Congreso, Euskadi y Andalucía se han decantado, no sin ciertas reservas y bastantes dudas, por apoyar el documento oficial, el aprobado por la mayoría del actual Comité Central, lo que deja a la candidatura de Alberto Cubero con un amplio un margen de posibilidades en el XXI Congreso. 

Párrafo aparte lo merece el caso andaluz, Andalucía con la delegación más numerosa al XXI Congreso del PCE es donde la resistencia del aparato se ha manifestado con mayor virulencia, hasta el punto que se detectan todo un cúmulo de supuestas irregularidades, tal como se recoge en la denuncia pública de dos camaradas andaluces: «… proceso congresual en el que toda la delegación ha sido elegida en una sesión online donde apenas se pudo producir un debate fructífero y superador,  hurtando a la militancia su derecho a expresar adecuadamente su punto de vista y propuestas, a la que ni siquiera asistió, se conectó sólo al final del mismo, el Secretario General del PCA, lo que demuestra el interés que tiene la dirección andaluza por reconstruir el Partido, y donde ni siquiera se respetó el voto secreto de los delegados y delegadas.»  ^[2]Hojas de Debate, 11 de junio de 2022.

Circunstancias que han dando pie a la puesta en marcha de una iniciativa de impugnación de la Conferencia del PCA que vienen suscribiendo militantes de diferentes territorios.

El XXI Congreso del PCE va camino de convertirse en un campo minado para la actual dirección embarcada en un gobierno de coalición que:

• Aumenta, en proporciones nunca vistas el gasto militar, para regocijo del complejo militar-industrial estadounidense y la OTAN.
• Abandona al pueblo saharaui en manos de un autócrata, Mohamed VI.
• Representa los intereses de la clase empresarial y de la UE, con reformas que ni de lejos tocan aspectos estructurales de la economía, el mercado laboral o el entramado legislativo del régimen del 78.
• Debilita la posición de España en el norte de África dando pie a la suspensión del “Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación”, suscrito con Argelia, lo que se traducirá, con toda probabilidad, en un encarecimiento del gas que España le compra y que representa el 40% del gas que consumimos. ^[3]«… la Asociación Profesional de Bancos y Establecimientos Financieros argelina (ABEF) ha ordenado congelar todas las operaciones bancarias relacionadas con el comercio hacia el Estado … Seguir leyendo
• Se involucra en una guerra, Ucrania, donde lo que se dirime son los intereses geoestratégicos, económicos-energéticos-militar, de los Estados Unidos/OTAN/UE debilitados por los fracasos en Afganistán, Siria y Oriente Medio, la pujanza de la economía china, el resurgimiento de Rusia como actor de peso en la política internacional y los éxitos de la izquierda en países de América Central y del Sur o la presencia de Rusia y China en África.

A lo que el equipo de Santiago responde “sin nosotros hubiese sido peor”. En este sentido,  Herwig Lerouge al hablar de la participación de los partidos comunistas europeos en los gobiernos señala: «Todo lo que pueden decir en su defensa, es la eterna cantinela de los socialdemócratas: “Sin nosotros, hubiese sido peor”. Pero no, hubiese sido bastante parecido, o incluso mejor, pues MEDIANTE SU PARTICIPACIÓN PARALIZARON UNA PARTE DEL POTENCIAL DE RESISTENCIA… la participación en gobiernos en estas condiciones significa únicamente la participación en la regresión social, incluso aunque logre ralentizarla. SIGNIFICA DESARMAR A LA RESISTENCIA Y DARLE FALSAS ESPERANZAS AL MOVIMIENTO OBRERO.» ^[4]La participación de los partidos comunistas en el gobierno, …Herwig Lerouge. La caja de herramientas. Biblioteca virtual de la UJCE.

La domesticada participación de militantes del PCE en el gobierno, está teniendo, por más que lo nieguen, un efecto demoledor para el partido. A la pérdida de credibilidad se suma la pérdida de militancia agravada por el prácticamente nulo incremento de la misma, el desdibujamiento del partido como herramienta de la clase trabajadora en la lucha por la superación del capitalismo, o su ausencia en el imaginario colectivo al estar opacada o difuminada su presencia en las movilizaciones y movimientos sociales, así como en las coaliciones de las que forma parte. 

Finalizadas, en los distintos territorios las Conferencias, se abre un espacio de reflexión para las delegadas y delgados, electos al XXI Congreso del PCE, que tienen en sus manos, el 8/9/10 de julio, el futuro del partido, su pervivencia como una herramienta más, de la clase trabajadora, en la lucha por la superación del capitalismo y el socialismo o, por el contrario -al igual que ha ocurrido con otros partidos comunistas europeos, para jolgorio y satisfacción del capital y sus administradores socialdemócratas- su práctica desaparición en manos del equipo de Enrique Santiago.

Hacer de la necesidad virtud. 

De la necesidad de disponer, para garantizar los avances sociales, la superación del capitalismo en una sociedad más justa y equitativa, se nos deriva a las/os militantes comunistas la virtud de salvar al PCE de su demolición.