La ultraderecha española que nunca se fue
Quede claro que la Extrema Derecha está preocupada por el devenir de España y que estos militares presuntamente golpistas avisan (qué atentos) a la ciudadanía española “al objeto de prevenirla y de que tome conciencia de la gravedad de la situación actual”.
La ultraderecha española que nunca se fue retoma “por do más pecado había”, esto es la vieja y muy recurrida costumbre de recurrir a los militares para disciplinarnos o, por lo menos, meternos un poco de susto en el cuerpo social. Resulta que tenemos un Gobierno que no les gusta, que se pronuncian en contra de la amnistía, que denuncian el «acoso» al Estado de Derecho y reclaman la destitución del Presidente del Gobierno y la convocatoria de elecciones. Será que las que acabamos de tener no les valen porque las elecciones militarizadas son las únicas que garantizan los resultados que ellos consideran como únicos aceptables.
Un grupo de 56 militares en la reserva ha suscrito un anacrónico manifiesto. Al comunicado de estos 56 jefes en situación de retiro se ha adherido la Asociación de Militares Españoles, que aglutina a más de 800 integrantes de los Ejércitos también en situación de reserva. Los firmantes muestran su «preocupación por la situación actual» y denuncian «la ausencia de Justicia, Igualdad y Democracia en España». Nada nuevo cara al sol con la camisa irremediablemente vieja. Como era de suponer, el tema se ha tratado como un reparto de carnaza mediática, ocupando el tiempo de morbo de no pocas sesiones tertulianas en las que se ha difundido la mala noticia, aunque no se ha profundizado en los muchos interrogantes que la sustancian.
El periódico El Mundo se hace eco de otro grupo de militares (esta vez en activo) que propone un “movimiento pasivo” consistente en renunciar al mando, devolver los galones al Ministerio de Defensa, alegando razones de conciencia. Anuncian que no oiremos ruido de sables porque no van a salirse de la legalidad.
Llama la atención cómo se autoproclaman juez y parte y se conceden la absolución por adelantado (¿indulto o amnistía?). Mira por dónde van a crear un nuevo modelo de objetor de conciencia.
Y para completar el complejo esquema de intereses en juego y posicionamientos políticos debemos tener en cuenta el comunicado del Colectivo Anemoi ante estas manifestaciones que califican «como nueva oleada de declaraciones sediciosas de altos mandos militares» y de las responsabilidades de quienes tienen arte y parte: «El retorno de estas intimidaciones militares de extrema derecha es, a nuestro juicio, responsabilidad, cuando menos, del silencio cómplice del Rey, de la inacción del PSOE y de la actuación … de su ministra de Defensa».
Tampoco sabemos lo que piensan al respecto nuestros imperialistas norteamericanos. Habrá que esperar unos años para que nos enteremos de los sórdidos detalles de la injerencia estadounidense en nuestros asuntos, como, por ejemplo, en aquel 23F.
Quede claro que la Extrema Derecha está preocupada por el devenir de España y que estos militares presuntamente golpistas avisan (qué atentos) a la ciudadanía española “al objeto de prevenirla y de que tome conciencia de la gravedad de la situación actual”.

Y es que en este país tropezamos con una constitución producto de una transición inmodélica en la que no solo se legalizó el franquismo, sino que, además, este participó en su elaboración y permanece incrustado de manera amplia en múltiples sectores del aparato del estado.