ACATS apoya el Encuentro Sandinista de solidaridad con Nicaragua

Los detractores de la Revolución Popular Sandinista se olvidan que el 19 de julio de 1979, los nicaragüenses derribaron la Tiranía de los Somoza y convirtieron al país en un referente mundial de Gobierno popular, democrático y social.

La Asociación Cultura y Análisis para la Transformación
Social (ACATS), apoya este ENCUENTRO y anima a los lectores y lectoras de Hojas de Debate a inscribirse en el Encuentro Sandinista de Solidaridad con Nicaragua que tendrá lugar en Madrid el próximo 21 y 22 de octubre (puedes hacerlo entrando en la Web)                               

¿Por qué interesa Nicaragua?

Este Encuentro será muy provechoso para la militancia de izquierdas que todavía aprecia la Solidaridad Internacional como uno de sus valores esenciales y necesarios, para movilizar la conciencia de clase mundial.

¿Qué pasa en Nicaragua?

Hoy nadie discute que el pueblo nicaragüense, paso a paso, está construyendo una nación soberana e independiente y que no tiene otro camino que la ruptura de la relación histórica de sometimiento colonial impuesta por los Estados Unidos y la construcción de otra nueva. Con el triunfo de la Revolución Popular Sandinista (19-julio-1979), Nicaragua logra un Gobierno de liberación nacional derrocando la Tiranía somocista. Una ruptura no aceptada por Washington que desata una guerra económica, cultural y mediática contra esta pequeña nación. A esa agresión devastadora se ha unido la Unión Europea. Lo mismo está sucediendo con Cuba y Venezuela. Las tres naciones rebeldes forman una unidad que está siendo la punta de lanza de las transformaciones sociales progresistas en América Latina y eso beneficia enormemente nuestra lucha por cambios, en el mismo sentido, en el Estado español, que tendrán sus propias características locales. 

Cuba, Nicaragua y Venezuela son parte del nuevo orden mundial multipolar que lideran países como Rusia, China, India, Brasil, etc. En América Latina y el Caribe surgen nuevos candidatos que quieren caminar en esa dirección de pluralidad internacional que hacen factible un orden Iberoamericano horizontal y democrático que debiera ser aceptado y reconocido por el Gobierno español.  

Si nos ceñimos a Nicaragua, hay que reiterar que su Gobierno y su pueblo son blanco permanente de esa feroz agresión criminal y terrorista atlantista. Esta forma de actuación brutal es la principal fuente de violación de los Derechos Humanos en la actualidad y se manifiesta principalmente en la perversa y salvaje manipulación mediática. Los detractores de la Revolución Popular Sandinista se olvidan que el 19 de julio de 1979, los nicaragüenses derribaron la Tiranía de los Somoza y convirtieron al país en un referente mundial de Gobierno popular, democrático y social. Los hitos de la nueva Nicaragua fueron la campaña de alfabetización nacional, la reducción acelerada de la pobreza, la conquista de los derechos sociales en Educación y la Sanidad Pública para los sectores populares; cambios que se recogieron en la primera Constitución democrática de su historia, que fue sancionada en plebiscito, en medio de una guerra declarada por la Administración Reagan que duró 9 años (1981-90), con el objetivo de restaurar la Dictadura, al precio de una nueva masacre. 

La lucha sandinista por la democracia social y la resistencia popular a la guerra, suscitaron una ola de Solidaridad Internacional en todo el mundo, comparable con la que generó la Guerra de Vietnam (1955-75). Recordemos que la guerra contra Nicaragua causó más de 40.000 víctimas mortales (1% de la población), más las decenas de miles de heridos en combate y otros tantos por actos terroristas que ocasionaron la destrucción de su economía. El Gobierno de Nicaragua recurrió a la Corte Internacional de Justicia el 27 de junio de 1986, que en sentencia firme declaró agresor a los EE.UU, condenándolos a indemnizar a Nicaragua con 12.000 millones de dólares, cantidad que siguió aumentando hasta el final de la guerra en 1990. Hasta el día de hoy la superpotencia no ha acatado la sentencia. 

En 1990, con una economía destruida cuya inflación llegó al 20.000%, el FSLN perdió las elecciones ante una oposición comprada por Washington. El Gobierno y la Asamblea Nacional pasaron a ser controlados por la vencedora Unión Nacional Opositora (UNO), que aplicó la política de choque neoliberal, favorable a la oligarquía, pero ocurrió algo impredecible: tras 16 años de neoliberalismo, el sandinismo regresó al poder por vía democrática en unas elecciones generales. Se inauguró así, en 2007, la 2ª etapa de la Revolución. 

El caso de Nicaragua es especialmente emblemático de antiimperialismo al representar con nitidez, la fuerza imbatible de un pueblo cuya resistencia resulta ser un ejemplo lleno de grandes enseñanzas. 

La Asociación Cultura y Análisis para la Transformación Social (ACATS), forma parte del Comité Europeo de Solidaridad con la Revolución Popular Sandinista (CES-RPS) y ahora trabaja en la difusión de ese importante evento, convocado para el 20, 21 y 22 de octubre de 2023. 

Desde aquí, la revista Hojas de Debate anima a sus lectores y lectoras de todo el Estado a participar en el mismo.

¡ENTRA en la Web e inscríbete ya!

¡¡RESERVA ese fin de semana en tu agenda (20, 21 y 22 octubre) y acude a este ENCUENTRO INTERNACIONALISTA!!

¡¡¡DEFENDAMOS, desde el Estado Español, la lucha antiimperialista, valiente e inclaudicable del pueblo nicaragüense, por su INDEPENDENCIA Y SU SOBERANÍA!!!

Madrid, 2 de septiembre de 2023

José M. Torres, responsable de ACATS en el CES-RPS



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One thought on “ACATS apoya el Encuentro Sandinista de solidaridad con Nicaragua

  • 5 de octubre de 2023 en 01:20
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    Gracias Pepe, por ese estupendo artículo. Así es: Nicaragua está realizando la segunda parte de su revolución. Los jóvenes han tomado el relevo. VIVA NICARAGUA LIBRE….!!! VIVA el FSLN…!!!

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