Con el XIV Congreso, el Partido Comunista de Canarias emprende su reconstrucción

Desde el PCC, abogamos por la confluencia, como en 1986, de todos los  colectivos, partidos, asociaciones en un nuevo movimiento por la Paz que saque a  Canarias y a España del conflicto ucraniano y de la pertenencia a la OTAN.

Superando una larga etapa de hibernación, el Partido Comunista de Canarias  (PCC) de mano de una dirección renovada y rejuvenecida y una militancia comprometida, retoma la lucha por la emancipación de la clase obrera y el socialismo, tras rechazar,  con una Enmienda a la Totalidad (ET), el documento presentado por la comisión  preparatoria del Congreso dependiente del Comité Nacional saliente. 

Tanto la ET como las Resoluciones aprobadas abordan cuestiones de máxima  actualidad y trascendencia en Canarias, modelo económico, paro, corrupción, vivienda,  sanidad, conflicto capital/trabajo, feminismo, paz, presencia del partido en la sociedad  canaria. 

Por primera vez en la historia del PCC, se elaboran unos documentos, la ET y las  Resoluciones aprobadas, que huyen de generalidades y clichés y se centran, de acuerdo a  la máxima marxista de “el análisis concreto de la realidad concreta”, en lo que afecta de  manera directa a la clase trabajadora canaria. 

El análisis de la realidad canaria, recogido en la ET pasa por poner en evidencia  su Régimen Económico y Fiscal, su sesgo eminentemente favorecedor de los intereses de  las oligarquías autóctona y foránea a través de instrumentos fiscales que sitúan a Canarias  en los límites de un paraíso fiscal y han sido de todo punto ineficaces para superar el  crónico desempleo, la dependencia alimentaria y energética o un modelo económico que  nos hace dependientes en exclusiva del sector servicios, fundamentalmente del turismo. 

El déficit en vivienda pública, en servicios sociales y sanidad o la bolsa crónica  de pobreza y precariedad son, a pesar de los ingresos millonarios por el turismo, con  ocupaciones que rozan el 100%, otros de los aspectos de la realidad canaria que no quedan  fuera de la ET aprobada. 

La corrupción, como fenómeno inherente al capitalismo, azota Canarias desde  siempre y desde siempre es un parásito que extrae rentas de la clase trabajadora y las  destina a satisfacer las ansias de acumulación de las oligarquías. 

Los instrumentos fiscales del REF que han servido para capitalizar empresas, pero  no para crear empleo; para la adquisición de suelo o bienes inmuebles por empresarios y  profesionales, pero no para ampliar el parque de vivienda pública y sí para encarecer el alquiler, el suelo edificable y destruir el entorno natural con edificaciones a pie de costa; para comprar deuda pública que se recupera con intereses que pagamos todos/as; para  desgravar el impuesto de sociedades hasta el 4%. Son la evidencia de lo que es la “corrupción legal”, un conjunto de normas y disposiciones hechas ad hoc, puestas en  vigor con el único objetivo, la realidad así lo demuestra, de favorecer a una clase social,  el empresariado, la oligarquía, en detrimento de la clase trabajadora. 

El triunfo del NO a la OTAN en Canarias, en el referéndum de 1986, por siete  puntos de diferencia con respecto al sí, fue muestra de la voluntad neutralista y del  compromiso con la paz de la clase trabajadora canaria, voluntad y compromiso que siguen  plenamente vigentes. 

Treinta y siete años después, la expansión de esa organización, a la que dijimos  NO, nos ha conducido a una guerra que está ocasionando a la clase trabajadora  innumerables dificultades, cierre de empresas y pérdida de puestos de trabajo,  encarecimiento de la cesta de la compra, legislaciones laborales que precarizan la vida de  la clase asalariada, aumento de la edad de jubilación, aumento del número de años de  cotización para acceder a la pensión. De nuevo, se hace necesario una respuesta desde el  partido, desde las/os comunistas. 

Desde el PCC, abogamos por la confluencia, como en 1986, de todos los  colectivos, partidos, asociaciones en un nuevo movimiento por la Paz que saque a  Canarias y a España del conflicto ucraniano y de la pertenencia a la OTAN.  

Tanto la ET, como las resoluciones, explicitan las  alternativas de los/as comunistas – a corto, medio y largo plazo – a los desmanes derivados  de un sistema, el capitalista que, por su insaciable expolio de los recursos naturales, por  su irrefrenable necesidad de someter y explotar a la clase trabajadora, por su inherente  corrupción, por su adicción a la guerra, demuestra que es irreformable y conduce a la  humanidad a su destrucción. 

Las/os comunistas canarios/as nos negamos a resignarnos y no nos rendimos.  

La reconstrucción del PCC es nuestra tarea inmediata, la celebración de una  Conferencia Programática, en un plazo máximo seis meses, la acción política del partido  imbricada en la lucha de la clase trabajadora, la lucha por la paz y la salida de la OTAN,  la denuncia de la corrupción,… son hitos en la lucha por el socialismo y el comunismo. 

Desde Canarias invitamos a la militancia del partido, a las/os comunistas de todo el país a continuar con la lucha contra el capitalismo, a perseverar en la lucha por el  socialismo, a revitalizar al partido como vanguardia de la clase obrera.

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