La izquierda necesaria. Una entrevista a Juan Ramón Motoso

En Hojas de Debate creemos que hay que reflexionar sobre la situación en IU cara a la próxima XII Asamblea Federal. Y nos interesa conocer, más allá de los textos que se han venido publicando y los avales que se han conseguido para llevarlos al debate en la Asamblea, la impresión personal de reconocidos militantes. Hoy le preguntamos a Juan Ramón Motoso (1):

¿Cómo fue tu trayectoria ideológica hasta llegar a esta formulación de la Izquierda Necesaria?

Participar en la candidatura de la Izquierda Necesaria es un ejercicio de coherencia ideológica. La influencia paterna marcó mis convicciones ideológicas y mi afiliación al Partido Comunista de España y a Izquierda Unida. En mi opinión, defender una sociedad más justa es apostar por el socialismo y éste, desde posiciones materialistas, debe ser marxista, sin dogmatismos. En este sentido, Izquierda Unida ha desempeñado un papel importante en la articulación de izquierda española. Lamentablemente, dicha función, como consecuencia del surgimiento de Podemos y de la apuesta de la dirección de IU y el PCE por confluencias populistas, se ha desdibujado amenazando incluso su existencia. Participar en la Izquierda Necesaria es defender, frente a populismos interclasistas, el modelo político de Izquierda Unida.

¿Qué parte de los problemas políticos (y electorales) de IU provienen de una dirección que toma decisiones equivocadas o interesadas al margen o en contra del ideario proclamado. ¿Qué otros factores influyen en la situación de peligro que vive IU y que amenazan su propia existencia?

Su propuesta es premeditada y calculadamente confusa ya que buena parte de la afiliación no se identifica con el modelo populista de Podemos. Apuestan inequívocamente por una política de hechos consumados que sustituya paulatinamente a IU por un “nuevo sujeto político” que estará , principalmente, dirigido por Podemos.

 El concepto de convergencia electoral que predomina en la dirección de IU y el PCE destaca por confuso y equivoco. Puede afirmarse que desde 2015 se ha impuesto el posibilismo electoral a cuestiones ideológicas esenciales.

¿Cómo pueden la militancia, los afiliados, simpatizantes enfocar un debate interno participativo en las presentes circunstancias políticas del país y de la izquierda sin temor a represalias de los dirigentes? ¿Qué estrategia debe plantearse para que IU no sea víctima de una fatal contradicción entre lo que se dice y lo que se hace?

Lo que está en juego es el modelo de izquierda política en España. Por tanto, el debate supera y transciende a la propia Izquierda Unida. En este contexto hay que denunciar la existencia de presiones y falsos consensos que enmascaran divergencias con los objetivos de las burocracias políticas. Hemos pasado de la búsqueda de consensos a imposiciones de facto. En definitiva, se ha instalado el patrón de gestión de la dirección de Podemos.

Por otra parte, me cuesta entender que personas de izquierdas, por temor a represalias, condicionen sus posiciones políticas. Hablamos, salvo que se haya producido un cambio significativo en los valores que históricamente han caracterizado a las personas de izquierdas, de militantes acostumbrados a luchar contra todo tipo de injusticias sociales.

Recuperar conceptos, ideas, léxico y prácticas de esa izquierda con mochila es el reto para la izquierda y la clase obrera.

Sinceramente ¿veis posibilidades de lograr salvar a Izquierda Unida como organización política soberana que reivindica la lucha por el socialismo?¿tenéis confianza, fuerza, determinación y organización para derrotar las posiciones liquidacionistas de Enrique Santiago y su grupo?

Insisto, el reto es construir la izquierda que necesita la clase obrera en España. Izquierda Unida históricamente ha jugado ese papel pero, como toda organización, es un instrumento válido pero mejorable.

Nuestra confianza y determinación no es dogmática o idealista. Conocemos el contexto y las dificultades pero estas no condicionan nuestra convicción en la necesidad de una Izquierda Unida fuerte al servicio de los intereses de la clase trabajadora. Las prácticas liquidacionistas que denunciáis deben eliminarse mediante la síntesis, el consenso y la democracia interna.

En el seno del PCE se libra una batalla por el respeto y aplicación del XX Congreso contra los mismos oponentes que promueven en IU su desaparición ¿no crees que es el momento de que ambas confrontaciones se unan para combatir a unos mismos contrincantes?

 Actuar contra lo acordado colectivamente deslegitima a los dirigentes políticos. Nuestras propuestas confrontan con las suyas con vocación superadora, creadora de síntesis que articulen nuevas mayorías sociales y políticas. Se trata de sumar, sin sectarismos ni renuncias ideológicas.

Hoy en Izquierda Unida hay un mayor número de afiliados que no militan en ninguna organización política que no sea la misma IU ¿qué tenéis que decirles a todos estos afiliados?

Que la clase trabajadora necesita una organización que defienda sus intereses desde posiciones socialistas y republicanas y que el espacio político que históricamente ha representado IU no lo ha ocupado el populismo de Podemos.

Que es el momento de defender a Izquierda Unida frente a quienes la diluyen lenta y agónicamente y construir, entre todas y todos, la IZQUIERDA NECESARIA para la clase trabajadora.

(1) Líder histórico de Izquierda Unida, es asesor laboral. Entró en política en el año 1977 y durante varios años fue el secretario general de la agrupación local y miembro del Comité Federal del PCE (ahora Comité Central). Ha sido diputado provincial y concejal del Ayuntamiento de Torrent con Izquierda Unida.