Granada en defensa de la paz y contra la guerra
Esta Marcha por la Paz y la No Violencia en Granada ha sido una acción colectiva social y artística que envía un mensaje poderoso de que la guerra no es una fatalidad inevitable. Todo lo contrario: la paz es posible, pero hay que ganarla mediante una movilización general que la imponga a esa minoría belicista que actúa despreciando los más elementales derechos humanos y al margen de las más esenciales normas del derecho internacional.
El sábado pasado en la ciudad de Granada tuvieron lugar múltiples actividades en defensa de la PAZ y en contra de la GUERRA. Los actos fueron convocados en el marco de la Tercera Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia. La cartelería anunciando estos actos recogía la expresiva frase de ¡Un grito de Paz de Granada al Mundo!
A los actos se unieron diversas organizaciones sociales, culturales, deportivas, entre las que cabe destacar el llamamiento efectuado por la Universidad de Granada en favor de la Paz y la No Violencia a través del Instituto de investigación de la Paz y los Conflictos de la Universidad de Granada (IPAZ) calificando esta Marcha como una «acción política no violenta mundial. Una plataforma para que la ciudadanía exprese su profundísimo malestar ante tanta destrucción y violencia; por la dignidad humana (derechos humanos), transversal y universalista, motivada por el interés de la humanidad de cada persona superior a cualquier otro interés particularista, de clase, género, nacionalidad, etnia, etc.» A los actos asistieron representantes de la Costa Granadina por la Paz y Motril Espacio Abierto que contactaron con los organizadores del evento en Granada para confluir en el futuro mediante actividades compartidas.
Se organizaron bajo la cobertura de un Manifiesto en el que se defiende la prohibición de las armas nucleares; el desarme proporcional y la renuncia de los estados a utilizar las guerras para resolver los conflictos; la objeción de conciencia como derecho fundamental; la refundación de las Naciones Unidas mediante su democratización; el aseguramiento de un planeta sostenible; la garantía de un bienestar y de unos recursos para acabar con el hambre en el mundo; rechazo rotundo a cualquier discriminación entre las personas por causa alguna y, finalmente, el favorecimiento de una cultura de la no violencia.
La organización «Mundo sin Guerras y sin Violencia», cuenta con más de dos décadas de historia y ha sido reconocida por el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas y destaca por su independencia de subvenciones gubernamentales y su compromiso con la paz mundial.
La jornada comenzó “rebautizando” la conocida y céntrica Fuente de las Batallas por la de Fuente de La Paz. Sería conveniente que esta interesante iniciativa tuviera un recorrido administrativo mediante una petición colectiva de la ciudadanía granadina amante de la paz y la no violencia, dirigiéndola al consistorio municipal para que de manera oficial cambiara el nombre de este celebre lugar. La ciudad de Granada cuenta ya con una barriada con el nombre de La Paz.
La manifestación desde la renombrada Fuente de la Paz se desplazó más tarde por la Carrera, Salón y Paseo de la Bomba, culminando con un festival que celebró la paz y la no violencia con la participación de cientos de personas.
Esta Marcha por la Paz y la No Violencia en Granada ha sido una acción colectiva social y artística que envía un mensaje poderoso de que la guerra no es una fatalidad inevitable. Todo lo contrario: la paz es posible, pero hay que ganarla mediante una movilización general que la imponga a esa minoría belicista que actúa despreciando los más elementales derechos humanos y al margen de las más esenciales normas del derecho internacional.