Manifestación en Cádiz en solidaridad con los trabajadores del metal represaliados

Pese a la derogación del artículo 315.3 del Código Penal, el aparato represivo cuenta aún con otros tipos penales como el genérico de coacciones o el de desordenes públicos, para seguir penando a los piquetes de huelga.

Varios centenares de trabajadores del metal y de otros sectores de la producción y de los servicios se han manifestado en Cádiz en solidaridad con los metalúrgicos represaliados por su participación en la reciente huelga del metal de la provincia.

La comitiva partió a mediodía del sábado 15 de enero último de los Astilleros de Cádiz y finalizó en la Subdelegación del Gobierno. Fue convocada por la Confluencia Sindical Bahía de Cádiz, la Coordinadora del Metal de Cádiz,  la CGT y la Plataforma en Defensa del Metal, organizaciones sindicales que han tenido un fuerte protagonismo en la pasada huelga general del metal. En la pancarta principal podíamos leer: «Contra la represión, el pueblo responde».

El portavoz de la Coordinadora de Trabajadores del Metal, al término del acto, afirmaba que «A Cádiz no se le va a parar aunque envíen más tanquetas o el ejército entero, porque nosotros hemos sido ejemplo y el miedo ha cambiado de bando… si la clase trabajadora del mundo se para, se para el mundo».

En el cortejo podían verse ondeando banderas de Cuba y de la República en apoyo a los trabajadores detenidos de forma arbitraria días más tarde del fin de la huelga. Exigían los manifestantes la retirada de todos los cargos que se les imputan, así como el archivo de las diligencias y expedientes sancionadores. Se oyeron repetidos gritos de: «Marlasca dimisión» ¡¡Viva la lucha de la clase obrera!!

Días antes de la manifestación, los ocho trabajadores que había sido detenidos por las fuerzas policiales declararon en el Juzgado de Puerto Real.

En el comunicado de las organizaciones sindicales convocantes se expone que: «brindamos nuestro apoyo más decidido y sin fisuras a los compañeros detenidos el pasado día 16 de diciembre. Que tenemos muy claro que han sufrido la represión por pertenecer a la Clase Trabajadora y residir en Barriadas Obreras. Y que sus antecedentes son haber nacido en una tierra donde desde hace décadas se ha ido desmantelando el tejido industrial, donde se incumplen los Derechos descaradamente de l@s trabajador@s y donde los índices de desempleo nos impiden tener una vida normal

El comunicado añade que: «las movilizaciones del Metal se han debido, sobre todo, a la incompetencia de los diferentes gobiernos y a la no actuación de los diferentes mecanismos que debieran proteger a los trabajadores. Ni la Inspección de Trabajo ni la Justicia en cualquiera de sus formas han hecho ni hacen Justicia como proclaman. Al contrario, en lugar de hacer que se cumplan sus propias leyes para impedir que la patronal nos continúe explotando de la forma más arbitraria e impune, se han utilizado mecanismos de pura represión contra la Clase Trabajadora por exigir lo que nos corresponde

Pese a la derogación del artículo 315.3 del Código Penal en el 2021 que posibilitaba el castigo a los miembros de los piquetes de huelga con pena de prisión de un año y nueve meses hasta tres años o con la de multa de dieciocho meses a veinticuatro meses y por el que han sido procesados más de 300 trabajadores en los últimos años, la realidad es que el aparato represivo estatal cuenta aún con otros tipos penales como el genérico de coacciones o el de desordenes públicos, para seguir sancionando penalmente a los piquetes de huelga, de tal forma que la derogación antes referida ha resultado insuficiente, como ahora se demuestra con los trabajadores represaliados de la huelga del metal de Cádiz.

Todo ello sin perjuicio de la vía administrativa mediante la Ley Mordaza que no ha sido derogada, pese al compromiso del gobierno de coalición de diciembre de 2.019.

La lucha del metal en la provincia gaditana sigue viva. Semanas atrás ha comenzado una campaña para mostrar el apoyo ciudadano con los obreros represaliados en las redes sociales con el hashtag #Yo tambiénSoyCulpable y se están publicando diferentes videos en los que desde trabajadores anónimos a representantes políticos se autoinculpan. En uno de los vídeos, dos ciudadanos apoyan la campaña del siguiente modo: «Nosotros y nosotras estuvimos en las manifestaciones del metal acompañando a los trabajadores y trabajadoras en su lucha. Si defender un plato de comida para tus hijos y un trabajo digno es delito, nosotros también somos culpables».

Comparte este artículo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *